Los apartamentos cierran el año negro del turismo con un 67% menos de pernoctaciones
Las pernoctaciones en apartamentos turísticos descendieron un 67,1% en 2020. La caída fue algo más suave que la de los hoteles, que cerraron el año de la pandemia con una caída del 73,3%. Así se desprende de los datos de la encuesta de ocupación extrahotelera de diciembre, publicada hoy por el INE, y la de coyuntura turística hotelera, cuyos resultados salieron la semana pasada.
El número total de turistas que recibió nuestro país no lo conoceremos hasta este miércoles, pero solo entre enero y noviembre la pérdida fue de 61 millones. España recibió 18 millones de turistas extranjeros en los once primeros meses de 2020, frente a los 79 millones del mismo período del año anterior. Cerraremos el año con menos de 20 millones de turistas extranjeros, la peor cifra desde 1990.
Los campings y alojamientos de turismo rural sortearon mejor la crisis que el resto. Las pernoctaciones en campings disminuyeron un 46,7%, mientras que las del turismo rural cayeron un 46,4%. Los albergues lo pasaron peor: la caída fue del 74,9%. De todas las tipologías de alojamiento, los campings fueron los únicos que subieron los precios: un 1,9%, frente al turismo rural (-1%), apartamentos (-4,4%) y hoteles (-6%).
En conjunto, las pernoctaciones en alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos, campings, alojamientos de turismo rural y albergues) fueron de 52 millones. Entre turistas españoles y extranjeros, la caída es muy superior en los segundos: 72,4% frente a 33,7%.
Los puntos turísticos con menor caída
Tazacorte (La Palma), Alajeró (La Gomera), La Iruela (Jaén) y Frontera (El Hierro) son los puntos turísticos en los que los alojamientos extrahoteleros han sorteado mejor la crisis. En Tazacorte hubo 13.000 pernoctaciones en 2020, solo un 9% menos que el año anterior. En los otros tres municipios mencionados, la caída fue inferior al 30%.
En el extremo opuesto se encuentran Palma (Mallorca), Alfaz del Pi (Alicante), San Miguel de Abona (Tenerife) y Fuengirola (Málaga), cuyo porcentaje de caída supera el 80%. Es particularmente dramático el caso de Palma, que pasó de tener 1,9 millones de pernoctaciones extrahoteleras en 2019 a 7357 en 2020, según los datos del INE. La caída es del 96%.
Estos datos se reflejan en los de empleo. Las comunidades más dependientes del turismo son las que más puestos perdieron, con Canarias (-12%) y Baleares (-8,1%) a la cabeza.
Las grandes hoteleras españolas (Meliá, Iberostar, Riu y Barceló) han presentado un proyecto para impulsar el reposicionamiento de destinos turísticos “maduros” a través de fondos europeos, muchos de los cuales están entre los más afectados por la caída turística. Piden 2.000 millones para transformar Magaluf y Playa de Palma (Mallorca), Arona y Adeje (Tenerife), Benidorm (Alicante), Lloret de Mar (Girona), Puerto de la Cruz (Tenerife), San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), San Antoni de Portmany (Ibiza), Costa Calma (Fuerteventura), Teguise (Lanzarote) y Torremolinos (Málaga).
2