La Comisión Europea aboga por homogenizar la normativa que afecta a Airbnb y a Uber, según publica hoy el diario económico FT. Bruselas ya había anunciado que estaba preparando un informe sobre la denominada economía colaborativa, unas empresas que han suscitado polémica en su desembarco en muchos países europeos llegando a ser prohibida su actividad en algunos de ellos. Bruselas ultima ahora unas directrices para crear un paragüas normativo que pueda ser replicado en los países miembros y evite que las compañías tengan que adaptarse a cada estado. La prohibición debería ser “una medida de último recurso” para los gobiernos, según el borrador al que ha tenido acceso el diario económico.
Es previsible que el grueso de las medidas sea aceptado de forma positiva por las empresas afectadas, que ya habían pedido a Bruselas su intervención para poner orden en este tema. Sin embargo, parece que algunos puntos no convencerán demasiadoa a algunas compañías. El apartado donde puede haber más polémica es el relativo a la relación laboral con quienes presten servicios a través de estas plataformas. La Comisión apunta que aquellas compañías que no permitan a sus operadores fijar sus propios precios o que les obliguen a coger a determinados clientes podrían tener que considerar que esto es una “relación laboral”. Una clara referencia Uber y su modelo de negocio. La empresa estadounidense ha tenido ya varios conflictos con algunos de sus conductores que llegaron a demandar a la empresa por considerar que su relación era laboral, aunque desde la compañía siempre han defendido que son trabajadores autónomos.
Diferencias entre los países
La Comisión busca con esta normativa eliminar las diferencias entre los países y su normativa respecto a la actividad de estas plataformas. Así, la autoridad comunitaria busca una solución para el caso de Uber, que se tiene que enfrentar con la prohibición parcial de operar en algunos países de la UE.
Además, Bruselas critica algunos movimientos de ciudades como Berlín, que para frenar a Airbnb introdujo multas de hasta 100.000 euros para las personas que alquilarn los apartamentos enteros en esta web. Frente a este movimiento, la Comisión sugiere otro tipo de restricciones o normativas para regulen este tipo de actividades, como por ejemplo, introducir el número de días al año que se puede alquilar la propia casa a través de este tipo de plataformas.
Otro de los puntos que defiende la Comisión es el sistema de estas plataformas de valoración de quienes prestan servicios a través de ellas. Bruselas considera que este sistema permite mejorar la seguridad de los servicios.