Toxo prepara el terreno para un tercer mandato al frente de CCOO
UGT renovó su directiva el año pasado: Cándido Méndez y su entorno dejaron paso a la Ejecutiva de Pepe Álvarez en un congreso que estuvo muy reñido. Este 2017 es el turno de Comisiones Obreras. En junio, el sindicato liderado por Ignacio Fernández Toxo celebrará su congreso con la incógnita de si el sindicalista gallego seguirá al frente de la central. Aunque quedan cinco meses para la cita, los movimientos ya se han iniciado y apuntan a que Toxo prepara el terreno para un tercer mandato.
A lo largo de enero, el secretario general de Comisiones ha mantenido reuniones con los líderes de federaciones y territorios. “Quería saber su opinión, aunque parece que él ya tiene una decisión tomada”, dicen. Toxo también se ha reunido con los candidatos que darán el relevo a los actuales. La actitud que ha encontrado ha sido mayoritariamente favorable a su continuidad.
La incógnita de si se presentará o no se podría despejar pronto: el próximo 15 de febrero el sindicato celebra un consejo confederal, su máximo órgano de dirección entre congresos. Allí CCOO debatirá su estrategia para este periodo. Algunos esperan que sea entonces cuando Toxo anuncie su decisión. De no ser así, el siguiente consejo confederal se celebraría a mediados de mayo, una fecha demasiado próxima al Congreso, que tendrá lugar a finales de junio. La otra posibilidad es que el sindicato convoque entre febrero y mayo un consejo extraordinario para que el secretario general se pronuncie sobre su futuro.
Fernández Toxo cumple 65 años este noviembre y si sale reelegido estaría casi 13 años en el poder. Su antecesor, José María Fidalgo, estuvo dos mandatos aunque optó a un tercero pero fue vencido en unas disputadas elecciones por el gallego. Su homólogo en UGT, Pepe Álvarez, nació en 1956 (cuatro años más joven) y sustituyó a Cándido Méndez, que estuvo 22 años liderando la central sindical.
Según cuentan varias fuentes, el líder de Comisiones no ha comunicado cuál es su intención. “Con Ignacio nunca se sabe”, es una frase repetida por varios cargos relevantes. Sin embargo, las mismas fuentes apuntan a que apenas existe un cuestionamiento interno sobre la continuidad de Toxo. “Mi valoración de su gestión es muy positiva en unos años que han sido muy complicados”, dice un alto cargo. Otro apunta a que Toxo esperará más allá del 15 de febrero para anunciar su decisión para no eclipsar el debate sobre los asuntos que ocupan al sindicato.
Si habrá o no una candidatura alternativa está en el aire. El sector crítico, liderado por sindicalistas como Agustín Moreno quedó en letargo durante un tiempo. También Rodolfo Benito, vinculado posteriormente con el caso de las tarjetas black de Caja Madrid, lideró otra de las corrientes alternativas del sindicato. En los últimos tiempos un grupo de personas está tratando de reactivar de nuevo la corriente crítica. Para presentar una candidatura necesitarían el 10% de los 750 delegados que acudirán al Congreso Confederal.
Lo que sí apuntan muchos es que, en caso de ser reelegido Toxo, el sindicato tendría que sentarse a trabajar en una transición. Y ahí es donde entran las quinielas de quién podría sucederle. Dos nombres suenan con más fuerza: el secretario general de CCOO en Euskadi, Unai Sordo, y el secretario general de la Federación de Industria, Agustín Martín. Aunque ninguno de los dos se ha posicionado, son muchos los que nombran sus perfiles cuando hablan del futuro del sindicato.
El congreso confederal será el final de un proceso de consolidación y renovación de cargos. A lo largo de este primer semestre, todas las federaciones y uniones celebrarán sus congresos. En algunos habrá pelea. Es el caso de CCOO de Madrid, con un importante peso afiliativo en toda la organización, en el que el actual secretario general, Jaime Cedrún, se enfrentará a la candidatura Más Unión Madrid, que aún está en proceso de decidir su cabeza de cartel.
Sin embargo, la forma en la que se resuelvan estas batallas no tendrá impacto en lo que sucede con la confederación. “Son conflictos locales sin repercusión para el Congreso Confederal”, dicen. Las propias candidaturas críticas están volcadas en su labor interna, sin cuestionar si Toxo debe o no presentarse a la reelección.
