El pleno de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) aprobó el pasado miércoles el nombramiento de Beatriz de Guindos Talavera como nueva directora de Competencia. La sobrina del exministro y actual vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, vuelve al puesto que abandonó tras una brevísima y amarga experiencia de 24 horas en septiembre de 2013, cuando presentó su “dimisión irrevocable” tras la polémica generada por su nombramiento.
Guindos, que desde noviembre de 2016 era asesora del presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, sustituye al frente de la Dirección de Competencia, una de las más importantes del 'súperregulador', a Eduardo Prieto Kessler. El relevo, aprobado por un pleno cuyos miembros fueron nombrados por el anterior Gobierno, se produce en pleno cambio político, aunque en el seno de la CNMC aseguran que hace tiempo que Prieto había decidido abandonar su cargo a partir de julio.
A Guindos no se le conoce más vinculación con el PP que su apellido. Nacida en octubre de 1979, la nueva directora de Competencia de la CNMC es licenciada en Económicas con Premio Extraordinario por la Universidad Complutense de Madrid y completó su formación en IESE y Harvard, entre otras prestigiosas instituciones. Ingresó en 2003 en el cuerpo de técnicos comerciales, el mismo al que pertenecen su tío o la ministra de Economía, Nadia Calviño, entre otros muchos altos cargos.
Se sacó esa oposición con 24 años y su primer destino fue el Servicio de Defensa de la Competencia del Ministerio de Economía, cuando Luis de Guindos era secretario de Estado de Economía. Cuatro años después ya era subdirectora en la extinta Comisión Nacional de la Competencia (CNC).
En septiembre de 2013, con su tío como ministro de Economía y cuando la CNMC ni siquiera había echado a andar, este organismo la nombró directora de Competencia. Era un importante ascenso para la hasta entonces subdirectora de Industria y Energía de la Dirección de Investigación de la CNC, subsumida en la CNMC. Se armó un notable revuelo. Para muchos, el nombramiento ponía en entredicho la independencia de la CNMC. Implicaba también ascender a la entonces número dos de Guindos, Micaela Arias-Cañete, hija del entonces ministro de Agricultura y actual comisario europeo, Miguel Arias Cañete.
Ante la presión mediática, la sobrina de Guindos dimitió a las 24 horas de ese puesto directivo en el 'súperregulador'. Unos meses después (en febrero de 2014), el Ministerio de Economía la propuso como directora ejecutiva alterna en el Banco Mundial, con un sueldo que triplicaba al que tenía en la CNMC (218.620 dólares libres de impuestos). La hija de Cañete, que finalmente no promocionó, se acogió a una excedencia y desde hace tiempo no trabaja en la CNMC.
Tras su mandato de dos años en el Banco Mundial, Guindos regresó a la CNMC como asesora de Marín Quemada. El suyo no es el único cambio en el organigrama directivo del organismo, que lleva tiempo bajo una amenaza de troceo que no acaba de concretarse. Otro asesor del presidente, José Jaime Bernárdez Gumiel, es el nuevo director de Transportes y Sector Postal.
También ‘teco’, como Guindos y el antecesor de esta, Eduardo Prieto, Bernárdez Gumiel sustituye a Ángel Chamorro, persona cercana al exministro de Energía Álvaro Nadal. Chamorro vuelve a la Comunidad de Madrid, de la que ya fue letrado antes de incorporarse en 2010 a la extinta Comisión Nacional del Sector Postal (2010-2012)