La muerte de una mujer de 81 años en Reus (Tarragona), asfixiada en un incendio provocado por las velas con las que tenía que iluminarse después de que le cortaran la luz, ha propiciado la convocatoria de protestas ante las oficinas de Gas Natural Fenosa. Ninguna de las concentraciones ha sido multitudinaria, aunque se han producido acciones distribuidas por diferentes ciudades. En muchas de ellas ha destacado la presencia de líderes de las formaciones de Unidos Podemos, como en el caso de Madrid, con Pablo Iglesias o Alberto Garzón a la cabeza, o en Zaragoza, con el secretario de organización de la formación, Pablo Echenique, y la presencia de Iñigo Errejón.
En Madrid, Pablo Iglesias ha afirmado que “en la cuarta economía de la zona euro no se le puede cortar la luz o la calefacción a alguien por pobreza sobrevenida”. Iglesias se ha referido al concepto de patriotismo español después de las celebraciones solemnes del inicio de legislatura: “Algunos dicen que ser patriota es hacer cola con Rita Barberá para estrechar la mano a los reyes y a las infantas. Yo digo que ser patriota es poner a las victimas de la pobreza y los recortes en el centro del debate politico”, ha añadido.
La concentración de Barcelona ha congregado a medio centenar de personas, encabezadas por el secretario general de Podem Catalunya y diputado en el Parlament, Albano Dante-Fachin. Los concentrados han reclamado a las empresas eléctricas que dejen de cortar la luz y el gas a las personas vulnerables. Asimismo, han instado al Govern a que haga cumplir la ley contra la pobreza energética catalana y que imponga una sanción “ejemplar” a la compañía.
Simultáneamente, otros grupos se han concentrado en diferentes ciudades, también convocados por Unidos Podemos y organizaciones sociales locales.
Otros partidos, aunque no se han sumado a esta convocatoria, han expresado su rechazo a la gestión de la pobreza en España. El PSOE ha criticado la “inacción” del Gobierno mientras Ciudadanos pide una normativa “estatal”, aunque ha rechazado usar el suceso de Reus como “arma arrojadiza”. El Gobierno del PP ha tumbado todas las propuestas legislativas para paliar la pobreza energética en España.