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La consultora fundada por Cristóbal Montoro diseñó el ERE de Coca-Cola

Hay puertas giratorias. Y otras batientes. De sobra es conocida la relación entre las grandes empresas y los expolíticos a los que contratan para beneficiarse de su haz de contactos, y conocimientos, labrado durante los años en el poder. Por eso llama la atención que en el caso del ERE de Coca-Cola, uno de los más polémicos desde el inicio de la crisis porque se realiza por una empresa sin pérdidas y con una oferta de despido muy por debajo de la indemnización improcedente, se haya fichado para la asesoría a una firma muy próxima al actual Ejecutivo.

El diseño de este polémico recorte de plantilla está firmado por Equipo Económico, antiguamente denominado Montoro y Asociados, la consultora que fundó el actual ministro de Hacienda con su hermano y su equipo de confianza durante los años posteriores a su salida del Gobierno de Aznar.

Montoro se fue desligando paulatinamente de la consultora hasta el punto de vender su parte y cambiar el nombre de la firma en 2008, cuando el ministro pasó a ser diputado del PP. Sin embargo, al frente de la consultora siguieron los que en su círculo se conocen como los “Montoro Boys”. A saber, su hermano (Ricardo Montoro) y los dos jefes de gabinete que ha tenido al frente de la cartera de Hacienda en la última legislatura de José María Aznar. Estos son Ricardo Martínez Rico (hermano de su actual jefe de gabinete) y Francisco Piedras Camacho. El hermano de Montoro terminó saliendo también de la entidad en 2012 tras un choque con el Ministerio de Industria.

Piedras Camacho es el que rubrica la propuesta de ajuste en el informe técnico que la empresa ha utilizado para poner en marcha el ERE, y al que asesora, en la parte jurídica, el omnipresente despacho laboralista de Sagardoy. Se da la circunstancia de que, además de la propuesta de recorte de plantilla, Coca-Cola está implicada también en investigaciones con Hacienda, la casa en la que ahora se ubica el otrora fundador de la consultoría.

Así, la semana pasada Expansión adelantó que Coca-Cola Company (la empresa dueña de la marca con sede en Atlanta que se llama Refrescos Envasados) se enfrenta a un expediente por ingeniería fiscal con la forma de facturar a las embotelladoras españolas, que ahora se aglutinan bajo el nombre de Iberian Partners.

Los problemas de la empresa con el fisco vienen de muy lejos, ya que, según reveló El País, Hacienda le había abierto ya en 2011 actas por valor de 55 millones de euros por no pagar bien los impuestos entre 1997 y 2000 y mantenía bajo inspección las declaraciones entre 2005 y 2009, una investigación a la que le acaba de dar carpetazo. La elusión de capitales no se realiza por la misma empresa que ahora ejecuta el ERE, pero es parte interesada en toda esta operación, dado que se investiga la forma de facturar entre ambas compañías.

En cualquier caso, el informe elaborado por Equipo Económico de 214 páginas al que ha tenido acceso eldiario.es constituye, básicamente, una recopilación bastante reiterativa de los motivos que, a su juicio, hacen necesario el ERE, justificando, además, la fusión de las embotelladoras (ahora denominadas Coca-Cola Iberian Partners) hace menos de dos años. Detrás de esta decisión está, abiertamente, la mano de Coca-Cola Company, aunque la multinacional justifique ahora el ERE como una decisión de su socio español.

En el informe está claro el papel que ha jugado la compañía propietaria de la chispa de la vida. Con el fin de que su contraparte ibérica fuera más “productiva y eficiente”, y “tras más de 50 de años” de colaboración, “The Coca-Cola Company planteó a todos los embotelladores [...] que distribuían sus productos en España, Andorra y Portugal, la oportunidad de que sus respectivos contratos se realizaran de manera integrada”. Integración “bajo un mismo sistema de gestión” que contribuiría “a superar las dificultades acumuladas en el largo e intenso proceso de crisis económica sufrido desde 2008”.

Los supuestos motivos

Los supuestos motivos El documento elaborado por Equipo Económico justifica la necesidad de llevar a cabo una reestructuración con “causas productivas” y “organizativas”, pero también menciona un “deterioro” de la situación financiera de Coca-Cola Iberian Partners. Así, asegura que, en los nueve primeros meses de 2013, las ventas del conjunto de las embotelladoras se recortaron un 4,4% (hasta 2.055,8 millones de euros). Mientras, el margen bruto sobre ingresos de cada embotellador se ha deteriorado entre un 3,5% y un 18,6% entre 2010 y 2012. En estos dos años, el resultado de explotación agregado de las embotelladoras sufrió una caída del 29,7%.

Sin embargo, las causas directas a las que atribuye la reestructuración son las productivas y las organizativas. Las primeras son resultado de la crisis y de los cambios en el modelo de consumo de los españoles que, en estos años, se ha trasladado desde los bares y restaurantes a los hogares y, además, a formatos que son menos rentables para la compañía: es decir, se ha reducido el consumo de latas y botellas de vidrio y ha aumentado, asegura, la producción de PET, las botellas de plástico. Esto ha provocado que el volumen de litros vendidos por las embotelladoras haya caído un 4,3% entre 2011 y 2013.

Las causas organizativas tienen que ver básicamente con la necesidad de impulsar una agilización en la toma de decisiones, evitar “duplicidades” e “ineficiencias” e integrar la organización para que sea más “fuerte, flexible y capaz de responder a su situación económica”. La reestructuración se plasma en el cierre de cuatro plantas (Madrid, Alicante, Palma de Mallorca y Oviedo) de las 11 actuales y en definir una estructura de producción “circular”, “racionalizando las plantas de la cornisa cantábrica y Levante-Baleares” y cerrando la planta de Madrid. Un modelo opuesto al “radial”, que también consideró, y que sí mantendría la producción de la zona centro.

El informe afirma que el escenario más “factible y más eficiente” es el circular, dado que permite “unos ahorros anuales estimados de 33 millones de euros frente a los 20 del radial”. En materia de costes, trasladar producción y empleados en un modelo circular supone gastar 14,4 millones, cifra que ascendería hasta 21,9 si se optara por el modelo radial. La compañía tiene, así, bastante claro que su producción se debe desplazar a determinadas zonas de la periferia peninsular (a sus siete plantas de Barcelona, A Coruña, Bilbao, Valencia, Málaga, Sevilla y Tenerife), donde logrará unas “inversiones evitables” (esto es, que no tendrá que realizar) de 21,5 millones.

ERE por departamentos

ERE por departamentosAunque sin nombre ni apellidos de quiénes van a ser los trabajadores afectados por la severa reducción de puestos de trabajo, el informe técnico sí detalla una propuesta de recorte. En opinión del antiguo jefe de gabinete de Montoro, hay un “excedente estructural de plantilla” de 131 personas en el área de Soporte (financiero, compras, recursos humanos, desarrollo corporativo, comunicación y legal); de otras 469 en Comercial y Atención al Cliente, y de 633 trabajadores más en Industrial y Logística. La reducción global se verá compensada por la recolocación interna de 481 personas entre las tres áreas.

El documento también apunta “la existencia de 20 puestos adicionales a los analizados en los departamentos, que se encuentran en situación de excedencia o con una propuesta de baja por invalidez, motivos por los cuales se propone su amortización”. Así, el “efecto neto” del ERE “supone un total de personal afectado de 772” personas, obviando traslados forzosos.

Precisamente así, con esa cifra, concluye el informe firmado por el inspector de Hacienda y socio director de Equipo Económico, Francisco Piedras Camacho, jefe de Gabinete del Ministerio de Hacienda entre 2003 y 2004.

La historia de Equipo Económico

Equipo Económico cambió de nombre cuando el ministro vendió toda su participación en 2008. Ricardo Martínez Rico, que llegó a ser secretario de Estado de Presupuestos, es el presidente a la vez que consejero independiente de Abengoa y hermano del actual jefe de gabinete. Se da la circunstancia de que el hermano del ministro –que también se llama Ricardo– se quedó de accionista.

Las dos parejas de hermanos, los Montoro y los Martínez Rico, fueron los socios fundadores de esta firma que ahora se dedica a labores de cabildeo y de asesoría empresarial. En origen también estaba en el despacho el equipo de Rodrigo Rato de la época: Luis de Guindos (exsecretario de Estado de Economía) y José Manuel Fernández Norniella (exsecretario de Estado de Comercio), que salieron pronto a otros destinos más lucrativos.

Según varios medios, el ministro de Industria, José Manuel Soria, ha tenido una relación muy tirante con los Montoro brothers. La disputa se saldó con la venta por parte del hermano de Montoro de su participación en la consultora, pero también le salió caro a Soria, que se ha visto cada vez más relegado en el Gobierno.

Además, Abengoa –donde ahora es consejero Martínez Rico– ha demandado al Gobierno frente a una corte de arbitraje internacional por “expropiar sus termosolares” con la nueva legislación. Es decir, la empresa en la que sigue el hermano del jefe de gabinete de Montoro (y exsocio del ministro) ha demandado al Gobierno del PP por no atender sus peticiones. Equipo Económico asesora a varias de las empresas afectadas por los cambios de energía y también a las inmobiliarias.