De 11.30 a 11.40 horas. Fue el periodo de tiempo en el que Carmen (nombre ficticio) se ausentó de su puesto de trabajo el pasado 7 de junio, jornada de paros parciales convocada por los sindicatos, en el Centro de Tratamiento Automatizado (CTA) de la empresa pública en Vallecas. La mujer explica que sintió “una hemorragia” y pidió a sus compañeros de máquina que la suplieran mientras iba al baño. “Lo habitual”, comenta. Sin embargo, ese día su superior emitió un anexo en el que informaba de ese “incumplimiento de horario” y Correos le ha descontado 0,96 euros de su nómina de junio, como ha podido comprobar este medio.
El sindicato CGT ha denunciado públicamente lo sucedido –que recogió Ok Diario– y considera que se trata de un ejemplo del “acoso y represión cada vez más frecuentes” en ese centro de Correos en Vallecas (Madrid) y en otros de la empresa pública. Virginia Hidalgo, representante de CGT Correos Madrid, sostiene que el sindicato aprecia en la empresa pública postal algunas lógicas y un trato “poco humano” hacia sus trabajadores.
“Hace dos años fui a ese centro y ya me comentaban problemas para ir al baño. Especialmente los tiene el personal eventual, que es el más precario, pero a esta vez se ha dado con Carmen que es fija”, continúa la sindicalista.
Desde Correos explican a eldiario.es que la medida se ha tomado porque “la trabajadora no siguió el procedimiento establecido” para ausentarse. Según apuntan en la empresa pública, los empleados deben comunicar a un superior cada vez que quieran abandonar su puesto, aunque sea para ir al baño, “porque hay que tener siempre los puestos cubiertos para que no se paralicen las máquinas” y que esta trabajadora “debería saberlo dada su antigüedad en la empresa”.
Carmen niega con rotundidad la versión de la empresa. “Eso no es cierto. No tenemos que notificar a los jefes cada vez que vamos al baño, eso no es así”, afirma. La mujer cuenta que en sus más de 10 años de experiencia en el enorme centro de Correos en el barrio madrileño nunca ha visto seguir ese protocolo para ir al baño y que siempre que van al servicio se cubren entre los compañeros.
La trabajadora, que todavía asegura que no da crédito a lo ocurrido el pasado 7 de junio, explica que trabaja en “una máquina OCR” junto a dos compañeros. “Una persona alimenta la máquina y otras dos recogen. Yo estaba en la cabecera y mis compañeros recogiendo. Noté que me estaba dando una hemorragia y le dije a mis compañeros que si me cubrían mientras, como hacemos siempre”. Según la trabajadora la máquina “no se queda parada en la vida”, aunque desde Correos justifican que “su puesto estaba sin cobertura”.
“¿Quieren que esté en mi puesto con una hemorragia?”
Cuando regresó a su máquina, una superior le emitió un anexo por “incumplimiento de horario”, al que ha tenido acceso este medio. En la notificación figuran los diez minutos de ausencia y en el espacio de la trabajadora para alegar la ausencia queda recogido: “Ir al servicio para hacer mis necesidades”.
La trabajadora subraya que le parece “injusto” el trato dispensado por la empresa pública. “¿Tenemos que decir hasta lo que hacemos en el baño? ¿Si he ido a ponerme una compresa o estoy con colitis o vomitando?”, ironiza. “Tengo desarreglos hormonales por mi edad, noté la hemorraguia y fui al baño. ¿Qué quieren que me quede con la hemorragia con mis compañeros, hombres y mujeres?”, critica Carmen, que asegura que cuando fue al servicio comprobó que se había manchado el pantalón.
CGT ha denunciado lo ocurrido en los medios y solicitado que se elimine el anexo de incumplimiento de horario y devuelvan a Carmen los 0,96 euros. “Que la cantidad es lo de menos, pero es que me parece muy injusto lo que ha pasado. Mis compañeros no dan crédito, es la primera vez que nos ha pasado esto”, sostiene la empleada.
Desde CGT, así como Carmen, sospechan que la medida puede tener relación con “un mayor nerviosismo” de la dirección de Correos por los paros parciales convocados ese día. Las movilizaciones tenían por objecto denunciar que el Gobierno “está desmantelando Correos”, según los sindicatos, con recortes en los Presupuestos y miles de despidos en los últimos años.