La vieja idea de unir España y Marruecos a través del Estrecho de Gibraltar está “más cerca”, según el presidente de la empresa estatal que estudia en España este proyecto, que apela a la “colaboración público-privada” para sacar adelante “una de las mayores y más espectaculares infraestructuras en el mundo”.
En España, la empresa que analiza este proyecto desde hace más de cuatro décadas es la Sociedad Española de Estudios para la Comunicación Fija a través del Estrecho de Gibraltar (Secegsa), adscrita al Ministerio de Transportes.
En las cuentas de 2022 que ha remitido recientemente a la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), Secegsa ya no menciona el “bloqueo” de las relaciones con Marruecos como impedimento al proyecto, como hizo en las de 2021. Las cuentas las formuló el 1 de junio un consejo de administración renovado al que se incorporó en 2022 Purificación Causapié, ex portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid y actual directora del Gabinete del Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y Asuntos Constitucionales, Rafael Simancas.
El presidente ejecutivo de Secegsa desde 2020 es el general de División del Ejército José Luis Goberna, que en un artículo publicado recientemente en la revista Awraq, que edita Casa Árabe, repasa las primeras cuatro décadas de este proyecto y se muestra optimista tras la “ralentización” de los años 2010 a 2021, coincidiendo con las sucesivas crisis en las relaciones entre España y Marruecos: “El proyecto sigue dando pasos certeros y cada vez está más cerca de llegar a buen término”, asegura.
El primer ejecutivo de Secegsa apunta como “factor determinante” para el proyecto su financiación, “especialmente en sus futuras etapas de construcción y explotación”.
Y aquí apela a la entrada del sector privado. “Los estudios realizados han confirmado la amplia oferta para este tipo de obras cuando el desarrollo y crecimiento que conllevan parece asegurado. Las últimas tendencias para este tipo de obra ya no parecen ser exclusiva del sector público, sino más cercana a la posible cooperación público-privada. Este variado y esperanzador clima ofrece al proyecto de enlace fijo la oportunidad de recorrer los últimos pasos que hagan factible y viable una de las mayores y más espectaculares infraestructuras en el mundo”.
Según Goberna, “no se debe perder de vista el carácter geoestratégico del Proyecto y sus vías de financiación en el concierto mundial, pues ambos serán los dos factores determinantes de su ineludible ejecución en el siglo XXI”.
El “principal factor determinante de su efectiva construcción, una vez superadas las incertidumbres sobre el terreno y la ingeniería”, no es en su opinión la financiación, sino el “carácter estratégico” del enclave.
Los motivos son su posición geográfica, “que facilita su centralidad en el planeta y su condición de conexión intercontinental”, “su internacionalización, ante la presencia de contingentes de EEUU y Reino Unido en la zona, a través de sus bases militares, del tránsito frecuente de la flota rusa o de las inversiones chinas”, y “los grandes intereses presentes en la región en sectores como el comercio, las inversiones en curso, el transporte a gran escala, o la defensa y seguridad para el hemisferio occidental”.
El artículo de Goberna es, presumiblemente, previo a que, en abril de este año, se celebrase la 43ª reunión del Comité Mixto Hispano-Marroquí del Proyecto de Enlace Fijo del Estrecho de Gibraltar. Este comité llevaba sin reunirse desde 2009. A la fecha del artículo, que no se especifica, no se habían reanudado los contactos.
Estudios, no obras
El objeto social de Secegsa se limita a realizar estudios, nunca obras, normalmente de manera conjunta con la sociedad homóloga marroquí, la SNED, ambas creadas en 1981. Cualquier construcción que se realice en el futuro implicaría un nuevo acuerdo bilateral con Marruecos, tal y como prevén los acuerdos internacionales vigentes sobre este tema.
Fuentes del Ministerio de Transportes indican que “no hay un proyecto de túnel sobre la mesa para transportar vehículos, personas, etc” y que actualmente “está enfocado a telecos” y, en su caso, energía. “Estamos en un periodo de desarrollo de esos trabajos del grupo de trabajo pero aún en una fase teórica y de viabilidad técnica”, indica una portavoz, que se remite al encuentro telemático que mantuvo en abril la ministra Raquel Sánchez con el ministro marroquí de Infraestructura y Agua, Nizar Baraka, en ese comité bilateral que llevaba 14 años sin reunirse.
Entonces, Transportes señaló que “el encuentro coincide con la reactivación de Secegsa, tras varios años sin una asignación presupuestaria relevante, y de encomienda para realizar los estudios necesarios para analizar la viabilidad del enlace fijo intercontinental para transporte de telecomunicaciones y energía”.
elDiario.es contó en octubre de 2022 que el Gobierno, tras el inesperado giro de Pedro Sánchez sobre el Sáhara para acercarse a Marruecos, había decidido relanzar este proyecto, tras asignarle 2,3 millones de euros de los fondos del Plan de Recuperación y una partida de los Presupuestos Generales del Estado para dar “el paso definitivo” hacia el inicio de las obras. El Ministerio de Transportes evitó entonces precisar sus planes y luego una portavoz aseguró que “no se ha reactivado el túnel”.
Meses después, en febrero, Raquel Sánchez anunciaba en una visita a Marruecos “un impulso a los estudios del Proyecto de Enlace Fijo del Estrecho de Gibraltar que se inició por ambos países hace ya cuarenta años”, que calificó de “un proyecto estratégico para España y Marruecos y también para Europa y África”. Lo hizo en un viaje en el que conoció de primera mano las necesidades de Marruecos en alta velocidad ferroviaria, puertos, aeropuertos o instalaciones de gestión del agua.
En sus cuentas, Sevegsa indica que a 31 de diciembre de 2022 tenía reconocida del Ministerio de Hacienda una obligación “no recibida” de 610.000 euros de fondos europeos del plan de recuperación, de los 50.000 euros que tenía asignados para 2022, para la “actualización” del anteproyecto. “Para recibir estos 610.000,00 euros, la Sociedad deberá justificar gastos por dicho importe atribuibles al proyecto”.
Reclamación millonaria
También informa Secegsa del fin de un litigio interpuesto por una empresa española, Presa Puente del Estrecho de Gibraltar, que le reclamaba una indemnización de 89,9 millones de euros por un supuesto incumplimiento de contrato. “El 20 de abril, el Juzgado de Primera Instancia nº 61 de Madrid emitió su fallo desestimando la demanda”. El impulsor de este proyecto, que como su propio nombre indica plantea construir una enorme presa con un puente de 2 kilómetros de longitud para unir Europa y África, es un constructor jiennense, Juan Valle, que en 2018 definía su propuesta como “una obra normalita, nada faraónica”.
La última versión publicada del proyecto de enlace fijo hispano-marroquí es un documento editado hace ya más de una década. Contemplaba un trazado de 42 kilómetros entre las terminales Norte y Sur para unir en poco más de media hora ambos continentes. Sobre el papel se ha planteado un servicio de transporte de pasajeros y mercancías mediante trenes lanzadera para coches, autobuses y camiones. Por el túnel también podrían circular trenes convencionales de pasajeros y de mercancías. La previsión eran unos 9,6 millones de pasajeros en 2030 y el tránsito de 7,4 millones de toneladas de mercancías para ese ejercicio.
Por ahora, lo único que hay son estudios previos en los que se ha gastado mucho dinero: 53 millones solo hasta 2011, según publicó en 2018 El Confidencial. Entre 1981 y 2014 se realizaron 48 campañas de investigación, con diez de sondeos, de los que cuatro fueron sondeos marinos profundos. Durante lo que Goberna denomina tercera “etapa de reflexión”, hasta 2021, los estudios “han ido incorporando, por un lado, los últimos avances científicos sobre la tunelabilidad de los terrenos afectados; y, por otro lado, la evolución en la industria de las tuneladoras”.
Aunque todavía está “pendiente de ratificar las últimas dudas de factibilidad técnica de la obra”, insiste el militar, “creemos firmemente que en pleno siglo XXI, la definitiva ejecución de la gran obra del enlace fijo lo convertirá en una puerta, un camino, una empresa común que facilitará la cooperación, la colaboración y la hermandad entre pueblos vecinos que será de mutuo provecho en todos los sentidos, y realzará el protagonismo que merecen ambas naciones en la comunidad internacional”.
El proyecto ha sido leído en clave energética tras la decisión de la UE de abandonar el gas ruso ante la agresión a Ucrania. En junio de 2022, medios marroquíes apuntaron que un futuro gasoducto Nigeria-Marruecos podría canalizarse a través del túnel euroafricano. Un gigantesco proyecto que implicaría transportar gas por varios países en conflicto. También se ha aireado un supuesto interés de Reino Unido por realizar esa conexión a través de Gibraltar.