Las grandes empresas de confección han comenzado a regresar a España para desarrollar aquí parte de su producción, en un proceso inverso a la “deslocalización” que se produjo algo más de una década, y se estima que el 15 por ciento de la producción que se marchó está volviendo a España y país vecinos.
Estos datos los ha aportado hoy Ángel Asensio, presidente de la Federación Española de Empresas de Confección, Fedecon, durante una rueda de prensa junto al presidente de la Cecam, Ángel Nicolás, y al de la Federación regional de textil y confección de Castilla-La Mancha, Félix Bellido, que acaba de integrarse en Fedecon.
El encarecimiento de los salarios en China, sobre todo, y de su moneda, el transporte y la energía están detrás de esta “relocalización” del textil y la confección en España, un sector que tiene 170.000 empleos en el país, en su mayoría femenino.
Pero otro aspecto fundamental es que las tiradas de las colecciones son cada vez más cortas y hay que adaptarse al mercado “lo antes posible”, lo que hace que resulte más rentable una producción cercana que otra situada a 9.000 kilómetros de distancia que tarda en llegar tres o cuatro meses.
Ante esta nueva situación, las empresas del sector deben tender a ser más competitivas, apostar por la calidad y especializarse, según el presidente de Fedecon.
Asensio ha puntualizado que las grandes tiradas de los productos básicos seguirán confeccionándose fuera de España, porque sigue siendo rentable, con lo que la producción que regresará son las tiradas cortas.
Aunque todavía es pronto para tener datos de cómo está influyendo este retorno de la confección en el empleo, los datos apuntan a que el 15 por ciento de lo deslocalizado en los primeros años de este siglo está regresando a España y países vecinos, como Portugal y Marruecos.
El presidente de Fedecon ha asegurado que muchos talleres de confección han desaparecido en estos años y que ahora hay que “reorganizarlos” para que vuelvan a tener empleo y capacidad de respuesta a la producción que llega.
En cuanto a Castilla-La Mancha, la Federación Regional de Empresarios de Textil y Confección se constituyó hace apenas dos años, con la suma de las asociaciones de Toledo, Albacete, Ciudad Real y Cuenca.
En Castilla-La Mancha hay 608 empresas de confección y 829 si se añaden las de textil, que dan empleo a unas 4.000 personas y cuya facturación en 2010 -que es el último dato oficial- alcanzó los 236,3 millones de euros, según han indicado a Efe fuentes de la Cecam.