El verano pasado, el jornalero Eleazar Blandón falleció de un golpe de calor tras ser abandonado a las puertas de un centro de salud de Lorca. Hace unos días, otro trabajador agrícola fue ingresado en estado “grave” tras sufrir un golpe de calor en Alhama (Murcia) durante su jornada laboral. El Ministerio de Trabajo ha recordado este lunes el peligro para la salud de ciertos trabajos más expuestos al calor en verano, para lo que la Inspección de Trabajo ha iniciado una campaña específica, sobre todo de carácter informativo. La intención es advertir a las empresas de su obligación de prevenir y proteger a la plantilla contra el “estrés térmico”. No hacerlo supone una infracción, que puede acarrear multas “de 2.046 a 819.780 euros” según la gravedad del caso, recuerda el Ministerio de Trabajo.
La vicepresidenta Yolanda Díaz ha presentado este lunes el Plan específico junto al director del Organismo Estatal de Inspección de Trabajo y Seguridad Social (OEITSS), Héctor Illueca. Díaz ha recordado el fallecimiento de Eleazar Blandón y pedido a las empresas su “implicación” en la prevención frente a los golpes de calor para evitar que se produzcan casos similares. “Si lo hacemos bien, podemos evitarlo. Si se cumplen las medidas preventivas, si se hace lo que se tiene que hacer, no veríamos lo que a veces vemos lamentablemente”, ha indicado la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo.
Pese al probado riesgo para la salud de las olas de calor, y en general de las altas temperaturas, en ocasiones estas se normalizan dado que son habituales en verano en España, sin que los empleadores pongan medios para proteger específicamente a sus plantillas de los peligros asociados al calor.
El Plan de la Inspección de Trabajo contra los golpes de calor incluirá varios ejes de actuación. Por un lado, el envío masivo de cartas informativas sobre las obligaciones de las empresas en materia de prevención en los sectores agrario y de la construcción, “incluidas ETT y administraciones públicas”. El Ministerio ha elegido los dos sectores por sus especificidades, de trabajo a la intemperie y que implican muchas veces una elevada carga física, que elevan el riesgo para los trabajadores, ha explicado Yolanda Díaz.
Cartas a unas 138.000 empresas
La Inspección de Trabajo enviará “137.503 cartas” a empresas que dan ocupación a casi un millón de trabajadores, “973.021 personas trabajadoras”, explican en el Ministerio. La misiva es de carácter meramente informativo, al contrario de otras campañas de la Inspección en la que se requiere a empresas que prueben el cumplimiento de la normativa laboral, por ejemplo en relación a la contratación temporal fraudulenta.
Héctor Illueca ha explicado que el principal objetivo de la Inspección es informativo y formativo. Las cartas incluirán información sobre las obligaciones legales de las empresas en materia de prevención de riesgos laborales, así como documentación específica sobre los riesgos de la exposición a las altas temperaturas y, sobre todo, cómo combatirlos con consejos diseñados por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo.
Las misivas también funcionarán como advertencia, ya que recordarán a las compañías las consecuencias económicas de no cumplir con las garantías de prevención. “Los incumplimientos del deber de protección de la seguridad y salud de los trabajadores puede ser constitutivo de infracción grave o muy grave, sancionable respectivamente, con multas que van desde 2.046 euros hasta 40.985 euros y desde 40.986 euros hasta 819.780 euros”, recuerdan en el Ministerio de Trabajo.
Illueca ha explicado que también tendrán lugar reuniones de carácter pedagógico con los agentes sociales territoriales de estos sectores de actividad, en los que se abordarán las medidas más efectivas para evitar los daños en la salud derivados de las altas temperaturas.
Sobre la actuación inspectora, Héctor Illueca ha indicado que están teniendo lugar ya “actuaciones específicas” en este tema, como ocurre otros años, y que pondrán especial atención a la “economía irregular”, donde se cometen más abusos. Además, ha explicado que ya se ha dado la calificación de “carácter urgente” a las denuncias que la Inspección de Trabajo reciba en esta materia “para actuar con la mayor celeridad posible” ante los abusos.
La autoridad laboral vigila cada verano los riesgos laborales relacionados con las altas temperaturas, explica Ana Ercoreca, sobre todo en el sector agrícola. “En la zona en la que trabajo, Huesca y Zaragoza, hace mucho calor en verano y los trabajadores están muy expuestos. Se habla con las empresas, se hacen requerimientos, para que garanticen su seguridad, por ejemplo con suministro de agua, gorras, la modificación de horarios para evitar las horas de trabajo con temperaturas más altas...”, explica la inspectora.