El Consejo Europeo abordará este miércoles la búsqueda de medidas para acabar con los paraísos fiscales y la evasión de capitales, para la que se espera la aprobación de un calendario de compromisos. Los países pobres pierden cada año 160.000 millones de dólares (124.000 millones de euros) por los impuestos que no pagan las empresas con filiales en sus territorios. Con menos de la mitad, 51.000 millones de euros, se podría acabar con la pobreza extrema, según Brookings Institute de EEUU. De acuerdo a estos datos, Intermón Oxfam exige a la Unión Europea la puesta en marcha de “medidas inmediatas” para acabar con la evasión fiscal.
Su investigación desprende que dos terceras partes del dinero escondido por las mayores fortunas del mundo se ubican en paraísos fiscales europeos. En este contexto, el Grupo Parlamentario Socialista ha presentado una proposición no de ley que incluye medidas concretas para poner fin al fraude internacional con la que se pretende imponer fuertes sanciones a las entidades bancarias implicadas.
En un momento donde los ciudadanos -procedentes de países ricos y pobres-, están sufriendo los efectos de la pobreza multiplicada por los recortes en los estados desarrollados, Oxfam estima que al menos 14 billones de euros pertenecientes a fortunas individuales se esconden en paraísos fiscales repartidos por todo el mundo. “Este dinero perdido representa el doble de lo necesario para que cada persona del mundo pueda vivir con más de 1,25 dólares al día, es decir, para acabar con la pobreza extrema”, explica la organización a través de un comunicado.
Por su parte, la UE calcula que los países miembros pierden 2 billones de euros en evasión fiscal cada año. Una cantidad que supera los presupuestos destidados a sanidad en cada estado europeo y supone cuatro veces el dinero destinado a educación en toda la Unión Europea.
“Muchos gobiernos afirman no tener más alternativa que recortar el gasto público y la ayuda al desarrollo. Pero sí la hay”, afirma José María Vera, director general de Intermón Oxfam. La solución pasa, según defiende, por gravar el dinero privado que oculto en paraísos fiscales. Por este motivo, pide a la Unión Europea que ponga encima de la mesa la lucha contra la evasión de impuestos de forma definitiva durante la reunión de este miércoles.
Intermón Oxfam sitúa el foco en la Unión Europea dado que, según su investigación, más de 9,5 billones de euros, están ocultos en paraísos fiscales europeos. Esta cifra supone dos terceras partes de la cantidad total de dinero escondido. Según se desprende del comunicado, Reino Unido y sus territorios dependientes acumulan más de la mitad de esta cantidad. “Este país se convierte en el principal culpable entre la UE, pero de ninguna manera en el único”, denuncia la organización.
“Los líderes europeos no tienen ninguna excusa para no actuar cuando ven la proporción de dinero que se esconde justo debajo de sus narices en los paraísos fiscales de los que son responsables. Pueden ser acusados justamente de pura y simple hipocresía”, clama Vera. “Es hora de que la UE tome partido por los ciudadanos de a pie, en lugar de beneficiar a unos pocos privilegiados. Su credibilidad está en juego”, concluye el presidente de Intermón Oxfam.
Propuesta socialista: sanciones a bancos y empresas
Coincidiendo con la cita europea, el Grupo Parlamentario Socialista ha presentado en el Congreso una proposición no de ley para luchar contra los paraísos fiscales. En ella incluyen medidas concretas para localizar y sancionar la evasión de impuestos muy centradas en penalizar a las entidades financieras. Así, dirigen uno de los focos principales hacia los bancos que actualmente se benefician de la evasión fiscal, así como los que se niegan a colabrorar con las autoridades tributarias a través del secreto bancario. Las entidades financieras que cometan estas prácticas, tendrían que pasar por la revocación de sus licencias y la consecuente anulación en su caso. La proposición insta a impedir que los bancos españoles posean filiales o sucursales en paraísos fiscales.
Además, a través de esta inciativa, solicitan a la Unión Europea la elaboración de una 'lista negra' que incluya todas las empresas localizadas en paraísos fiscales, que también serían sancionadas: no podrían acceder a ayudas, ni a ningún contrato con las administraciones de los estados miembros y supondría la suspensión de los vigentes convenios de doble imposición. La proposición no de ley insta también a la revisión de los paraísos fiscales calificados como tales en la legislación española.
El secreto existente alrededor de las empresas asentadas en paraísos fiscales es uno de los principales obstáculos en la lucha contra la evasión de impuestos. Los socialistas incluyen en su propuesta la introducción del intercambio automático de información en la Unión Europa. Es decir, solicitan la aprobación de la FACTA (por sus siglas en inglés) europea acordada por las cinco principales economías comunitarias, incluida España. Este sistema obligaría a las entidades financieras extranjeras a informar sobre cuentas en el extranjero de empresas y ciudadanos de cada país. Según el PSOE, esto evitaría la retención del 30% en los cobros de estas entidades.
También en la dirección de combatir la opacidad, la proposición insta a establecer un Registro Europeo de Fideicomisos, lo que supondría la declaración de los beneficiarios titulares y reales de los trust, con el objetivo de que pueda ser consultada por cualquier autoridad fiscal europea.