En España, cada persona bebe, de media, 58 litros de cerveza al año. Ese es el dato per cápita que ha publicado este lunes la patronal que agrupa a los fabricantes, en la que están grandes fabricantes como Mahou San Miguel, Heineken o Damm, pero también cerveceras artesanales. Un dato que incluye lo que bebieron los turistas.
Con ese consumo se superaron los datos prepandemia, porque se cerró 2022 con 42,34 millones de hectolitros, frente a los 41,3 de 2019, que hasta ahora había sido el mejor dato histórico.
Sube el consumo y la producción. En total se fabricaron en España 41,1 millones de hectolitros, un 7,9% más que en 2021, dato que coloca a este país como el segundo mayor productor de cerveza de Europa, solo por detrás de Alemania. Eso sí, estamos a años luz del mercado germano. Allí la producción de cerveza alcanzó en 2022 los 87,8 millones de hectolitros, más del doble que España. Pero se ha superado tanto a Polonia como a Reino Unido, que además es uno de los principales destinos de las exportaciones de cerveza local.
Ese dato esconde dos realidades: la de las grandes y la de las pequeñas empresas. Cerveceros de España reconoce que 2022 no fue “un buen año para las cerveceras con producciones menores a los 50.000 hectolitros, pues se ha observado un descenso del 3% tanto en producción como en número de centros operativos”.
Cae así el número de pequeñas o medianas cerveceras, porque respecto a antes de la pandemia se ha reducido un 35% el número de fabricantes. “En el craft ha habido cierres, por el efecto del cierre de la hostelería”, ha reconocido Jacobo Olalla, director general de Cerveceros, en la presentación del informe anual del sector. “Están volviendo a la normalidad, pero cuando llueve es más fácil mojarse”, en referencia a estos fabricantes artesanales.
Mahou, Damm y Heineken, en cabeza
Respecto a las grandes compañías, el primer productor es Mahou San Miguel, con 12,8 millones de hectolitros. Le sigue Damm, con 11,34 y Heineken, dueña de Cruzcampo, con 10,07 millones. El cuarto fabricante es Hijos de Rivera (Estrella Galicia), con 4,81 millones de hectolitros.
Son las mismas posiciones que tenían un año antes, pero con distintos datos de producción. En 2021, Mahou alcanzó los 11,95 millones de hectolitros. Damm, los 10,26; Heineken, 9,6; e Hijos de Rivera, 4,4; lo que apunta cómo han crecido los grandes de la cerveza.
En 2022, las exportaciones crecieron más que el consumo local. Aumentaron un 13,4%, hasta 4,2 millones de hectolitros. El primer mercado es Portugal. Allí van el 28% de las exportaciones. Le siguen Reino Unid0 (13% del total), China y Guinea Ecuatorial. Sin embargo, en estos últimos cae el volumen que exportamos. Un 3% y un 13%, respectivamente.
Sobre los precios y si crecieron en el año de la inflación disparadas, no dan datos. “No cabe duda del efecto de la invasión rusa a Ucrania, en los imputs”, ha asumido Olalla, pero la patronal asegura que “no tiene cifras porque no puede tenerlas, por Competencia”, ha matizado.
De cara a este año, la sequía de esta primavera va a afectar a la producción, porque tendrá que tirar de importaciones, pero al mismo tiempo se prevé un consumo record gracias al tirón del turismo. “Vamos a tener menor producción, habrá que importar más. Va a ser una cosecha mala”, ha reconocido Fernando Miranda, secretario general de Agricultura y Alimentación, durante la presentación del informe anual de Cerveceros. “Si al campo español le va mal a las cerveceras le va mal porque hay una menor disponibilidad de cebada cervecera, porque el 90% de la cebada que utilizábamos era nacional”, ha matizado Jacobo Olalla.