Los estanqueros franceses organizaron protestas en 80 ciudades por todo el país para protestar contra la iniciativa de la ministra de Sanidad, Marisol Touraine, de imponer la cajetilla neutra, sin diferenciación de marca, como medio para intentar reducir el tabaquismo.
Entre las acciones de protesta más visibles, los estanqueros vertieron delante de las prefecturas o de la sede del Ministerio de Hacienda en París toneladas de zanahorias, en referencia al logotipo de sus establecimientos.
Un portavoz de la Confederación de Estanqueros, además de destacar la amplitud de la movilización, subrayó a Efe que el paquete neutro supondrá una penalización para los profesionales del sector respecto a los países vecinos donde esa regla no se contempla, y por donde se les escapa una parte de las ventas.
El portavoz señaló que su principal reivindicación a los senadores, que desde el próximo día 14 van a tramitar la ley sobre la sanidad -en la que Touraine quiere introducir el paquete neutro-, es que no vayan más lejos de la nueva directiva europea, que sigue permitiendo la diferenciación por marcas en las cajetillas.
“Nadie ha aportado la prueba de que la cajetilla neutra contribuya a una disminución del tabaquismo”, señaló antes de añadir que las reglas que quiere fijar la ministra -entre otras imágenes de las consecuencias dañinas del cigarrillo- “transformarán los estancos en museos de los horrores”.
La Confederación de Estanqueros calcula que el 26,3 % de las ventas de cigarrillos en Francia se realizaron en “el mercado paralelo”, es decir, al margen de sus tiendas, que son 26.000 en toda Francia.
Ese “mercado paralelo” incluye las compras en el mercado negro, por internet a operadores extranjeros o en los estancos fronterizos de países vecinos donde los precios son más bajos.
Según el portavoz, el precio de la cajetilla de la marca más vendida es en Francia de 7 euros, frente a 5,30 euros en España.
Esa diferencia podría aumentar todavía más si sale adelante la propuesta de algunos diputados, que quieren elevar el precio a 10 euros como medida para reducir el tabaquismo.
De acuerdo con la organización patronal del sector, el pasado año cerraron 1.041 estancos en Francia, y desde 2003 han desaparecido más de 7.000.