El Gobierno ha aprobado este viernes el nuevo Plan Estatal de Vivienda 2018-2021, con ayudas tanto a la compra como al alquiler, con efectos retroactivos desde el pasado 1 de enero.
En el primer caso, se limita a menores de 35 años, en municipios de menos de 5.000 habitantes, una medida con la que el Gobierno pretende también favorecer la solución del problema de la despoblación rural. Se trata de una ayuda de hasta el 20% del precio del piso que se adquiera (con un máximo de 10.800 euros) para jóvenes de menos de 35 años e ingresos inferiores a tres veces el IPREM. El precio de la vivienda no podrá ser superior a 100.000 euros.
Ayudas al alquiler
Además, la ayuda al alquiler se podrá pedir para viviendas que supongan rentas mensuales de hasta 900 euros, frente al máximo de 600 euros fijado en el anterior plan, para adecuarlo así al encarecimiento de este tipo de vivienda. Se establece un límite del 40% de la renta (50% para menores de 35 y mayores de 65).
De su lado, las personas afectadas por desahucio contarán con hasta 400 euros al mes para pagar un alquiler, y los mayores podrán contar también con ayudas de hasta 200 euros mensuales para atender el pago de facturas de suministro (agua, luz, gas o de comunidad).
El plan se completa con iniciativas dirigidas a la promoción de viviendas para alquiler y para la rehabilitación de pisos y zonas urbanas.
Subvenciones por importe de 1.443 millones de euros
El Plan de Vivienda contempla subvenciones estatales por importe de 1.443 millones de euros, un 62,5% más que el anterior, que destinó a ese fin 888,2 millones entre 2013 y 2016, ha avanzado hoy el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, informa Efe.
De esta cifra, a la que hay que sumar la cofinanciación de las comunidades autónomas, 350 millones de euros corresponden a este año, 357 millones a 2019, 364 millones a 2020 y 372 millones a 2021.Fomento espera entregar 557.109 ayudas durante la vigencia del plan y calcula que las actuaciones contempladas permitirán crear 60.320 puestos de trabajo.