Ya hay una primera propuesta del Gobierno para avanzar hacia la cotización de los trabajadores autónomos según sus ingresos reales. El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, se ha reunido esta tarde con las tres organizaciones de trabajadores por cuenta propia más representativas, ATA, UATAE y UPTA, para explicarles sus planes para comenzar la transición al nuevo modelo de cotización a partir de 2021, de manera “muy progresiva”, que supondría que la gran mayoría de los autónomos seguiera cotizando como hasta el momento, o incluso que se redujera su cotización en los casos de menores ingresos, y que la subida de las cuotas afectara sobre todo a “unos 700.000 autónomos” con rendimientos de trabajo superiores a 25.000 euros anuales, según explican a elDiario.es en las organizaciones de autónomos.
La propuesta inicial del Gobierno, como ya adelantó el ministro de la Seguridad Social, plantea un sistema de tramos de cotización según los ingresos, pero fuentes de la negociación apuntan que este miércoles no se ha entrado en profundidad sobre estos “escalones” en la contribución. El nuevo mecanismo para cotizar no afectaría a todos los trabajadores por cuenta propia, con la exclusión de los autónomos colaboradores, los religiosos, los del sistema de módulos y, seguramente, los autónomos societarios.
El Ministerio sí ha trasladado a los colectivos de autónomos que la mayoría de los trabajadores no verán subir sus cotizaciones a la Seguridad Social con el nuevo sistema, que pretende reducir las cuotas a los que ganen muy poco, aunque sí supondrá un incremento para “unos 700.000 autónomos” con unos rendimientos del trabajo por encima de los 25.000 euros al año, confirman a este medio en las tres organizaciones.
El presidente de ATA, la organización de autónomos dentro de la patronal CEOE, ha manifestado hoy de nuevo su oposición a implementar el sistema de cotización por ingresos reales dada la crisis por la pandemia. En cambio, las organizaciones progresistas de autónomos UATAE y UPTA han celebrado que el Gobierno se decida finalmente a dar este paso, ya que es una demanda de los colectivos desde hace años y se quedó en el tintero en el pasado Gobierno monocolor de Pedro Sánchez.
Los responsables de UATAE y UPTA, María José Landaburo y Eduardo Abad, han destacado que este sistema será “más justo”, mientras que el presidente de ATA, Lorenzo Amor, ha sostenido que ahora “indudablemente no es el momento” para aplicar este cambio, que no considera “justo”, al aplicarse solo a algunos autónomos y dejar fuera a otros colectivos de trabajadores por cuenta propia.
Al contrario de lo que sucede con los asalariados, los autónomos en la actualidad pueden elegir su base de cotización a la Seguridad Social y el 85% contribuye por la mínima, según los datos de 2019. Este 2020, la base mínima está fijada en 944,40 euros, al igual que el año pasado, aunque hay algunos mínimos diferentes, por ejemplo, para los trabajadores por cuenta propia de más de 48 años, es de 1.018,50 euros. Esto provoca que haya autónomos con muy pocos ingresos a los que les cuesta mucho pagar su cuota (la cantidad mínima es 286,15 euros mensuales, que resulta al aplicar el tipo de cotización a la base) mientras que otros con ingresos más altos están cotizando por una parte muy limitada respecto a sus ganancias.
Cotizar por la mínima significa también prestaciones mínimas y se traduce en una diferencia sustancial en la protección social que tienen los asalariados, que cotizan por lo que ganan. Un ejemplo claro son las pensiones, con una brecha del 40% entre la pensión media de los autónomos y la de los trabajadores por cuenta ajena, así como las prestaciones de 'paro' por cese de actividad que se han implementado en esta pandemia y que se calculan según lo que cotiza el trabajador.
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha destacado en un comunicado que la propuesta inicial del Ejecutivo supondría que “los nuevos trabajadores por cuenta propia elijan su base de cotización en función de las previsiones de rendimientos que tendrán”. El ministro Escrivá ha planteado “un sistema flexible, que se pueda modificar a lo largo del año y que se regularice un año después, incluso con la posibilidad de que se devuelva el exceso de cotizaciones pagado por el trabajador”, añade la nota.
Muchos autónomos ganan menos del salario mínimo
Según los cruces que ha realizado el Ministerio de Inclusión con la Agencia Tributaria, en 2018 había “2,2 millones de autónomos con rendimientos de actividades económicas (RAE)” y “más de la mitad de ellos tuvieron en 2018 unos rendimientos menores al salario mínimo interprofesional (SMI), por lo que su aportación a la Seguridad Social sería menor que la actual con el nuevo sistema”. Es decir, más de un millón de trabajadores que con el nuevo sistema que propone le Ejecutivo cuya cotización mínima sería más reducida que la actual.
En la reunión, el Gobierno no ha trasladado sus planes sobre la tarifa plana, que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha recomendado este miércoles que se mantenga hasta que se cree el nuevo sistema de cotización. Fuentes de la negociación explican a este medio que “un 44%” de las personas que cotizan por la tarifa plana tienen rendimientos por su trabajo superiores al salario mínimo interprofesional y “un 16%”, por encima de 20.000 euros anuales.
El Ministerio ha trasladado su idea de negociar este nuevo sistema de cotización con los representantes de los autónomos, por lo que a partir de ahora las partes comienzan un proceso de diálogo para intentar alcanzar un punto en común.