La sede del laboratorio alemán Merck en la localidad francesa de Lyon fue registrada hoy por las fuerzas del orden en el marco de una investigación abierta sobre el medicamento contra la tiroides Levothyrox, cuyos efectos secundarios han sido denunciados por decenas de usuarios.
La farmacéutica indicó en una declaración a Efe que el registro comenzó a las 09.00 (07.00 GMT) y que la compañía colabora “plenamente” con los agentes.
La Justicia francesa abrió sus pesquisas el pasado 15 de septiembre por “engaño agravado, afrenta involuntaria contra la integridad física y puesta en peligro de la vida ajena”, recordó hoy el diario local “Le Progrès”.
El registro, según ese medio, está centrado en la localización de datos informáticos o administrativos.
La nueva fórmula del Levothyrox salió a la venta en Francia el pasado marzo y ha provocado según los pacientes numerosos efectos secundarios, como dolor de cabeza, caída de cabello, diarrea o vértigos.
A finales de septiembre, el Tribunal de Gran Instancia de Marsella, en el sur del país, había recibido 62 denuncias.
Francia es el primer país en el que se introdujo la nueva versión del Levothyrox y las quejas llevaron al Ministerio francés de Sanidad a intervenir y a anunciar que desde este pasado lunes iba a estar disponible igualmente la fórmula antigua.
La Agencia Nacional de Seguridad del Medicamento (ANSM), no obstante, precisó el pasado 27 de septiembre que los comprimidos originales solo iban a recetarse “como último recurso” y en cantidad limitada a aquellos afectados por efectos indeseables duraderos con los otros fármacos del mercado.