Se empieza a notar el cansancio en el mercado laboral. El tirón económico ya no es tan fuerte. Se mantienen las buenas noticias porque el paro se redujo en 42.409 personas en junio, pero, exceptuando 2020 por la pandemia, en todo los años desde 2011 había caído el desempleo con mayor intensidad. En el mismo mes del año pasado lo hizo en 166.911 personas. Las buenas noticias son que el empleo creció en 76.948 personas en el mes pasado, se ha conseguido un nuevo récord de contratos indefinidos, con 783.595, y el paro registrado se ha situado en 2.880.582, con lo que se mantiene en los niveles más bajos desde octubre de 2008, con el inicio de la crisis financiera. Respecto a junio de 2021, el paro ha descendido en 733.757 personas (- 20,3%). La afiliación media aumentó en 116.000 personas hasta superar los 20.300.000 afiliados.
La inflación y la incertidumbre en la guerra de Ucrania están haciendo mella en el mercado laboral, que empieza a dar síntomas de agotamiento. Junio suele ser un mes muy bueno para el empleo por la temporada turística y la construcción. Sin embargo este junio ha sido el más débil de la los últimos diez años, exceptuando 2020. Por ejemplo, en junio de 2019, el paró cayó en 63.805 personas, en 2018 lo hizo en 89.968, y en 2016 124.349 personas dejaron de estar inscritas en las listas de desempleados.
Los secretarios de Estado de Empleo y de Seguridad Social, Joaquín Pérez Rey y Borja Suárez, respectivamente, han considero lógico que el ritmo de descenso del paro y de creación de empleo se haya desacelerado en junio después de muchos meses marcando registros récord.
“Hay que tener en cuenta una variable muy importante y es que se sigue bajando el paro. Es evidente que el ritmo de descenso no puede darse con la misma intensidad con 4 millones de parados que con 2,8 millones, pero la bajada del paro sigue siendo muy significativa”, ha explicado Pérez Rey.
En la misma línea se ha pronunciado el nuevo secretario de Estado de la Seguridad Social, que ve lógico que, con el tiempo, el ritmo de crecimiento de la afiliación se vaya moderando, lo que no significa, ha precisado, que ésta no esté teniendo un comportamiento “extraordinariamente positivo”.
También han restado importancia al hecho de que la reducción del paro de junio (-42.409 personas) haya sido la menor desde 2008, descontando 2020, el año de la pandemia, y que la afiliación, por contra, haya firmado el tercer mejor junio de su historia.
“Que haya pequeños desajustes no es necesariamente una anomalía. (Los datos de paro y afiliación) funcionan con procedimientos administrativos distintos y puede haber estos desajustes”, ha apuntado Pérez Rey, que ha señalado que, dado el “intenso proceso de creación de empleo”, muchos trabajadores no apuntados a las listas del desempleo pueden haber encontrado trabajo por otras vías, lo que explicaría el mejor comportamiento de la afiliación.
Por primera vez en 2022 se firman menos contratos que en el mismo mes de 2021. El número total de contratos registrados durante el mes de junio ha sido de 1.768.988, lo que supone una bajada de 29.059 (-1,62%) sobre el mismo mes del año 2021. A pesar de este dato, con el incremento registrado en el mes de junio, la Seguridad Social alcanza los 20.102.037 afiliados de media en términos desestacionalizados.
Récord de contratos indefinidos
La buena noticia es que se volvió a romper un récord de contratos indefinidos: 783.595 contratos, que representan el 44,30% del total. Tras la reforma laboral esta modalidad de contratación se ha multiplicado por cinco en este mes. Para entender la magnitud que está cogiendo la contratación indefinida, se han realizado 3.281.858 contratos de este tipo en lo que va de año, lo que representa un ascenso de 2.324.951 (242,97%) sobre el mismo periodo de 2021.
Seis meses después de la entrada en vigor de la reforma laboral (y tres después de la aplicación de las principales novedades en materia contractual), continúan apreciándose sus efectos positivos en la mejora de la calidad del empleo. En junio, sigue acelerándose el aumento de los afiliados con contrato indefinido, que registran un incremento del 17% frente a hace un año.
Ante las palabras de varios dirigentes del PP señalando que los datos de desempleo son falsos, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha calificado de “patético y triste” que el PP hable de “maquillaje” al valorar los datos de paro, contratación y afiliación del mes de junio, cuando se trata de cifras “francamente buenas”, sobre todo en lo que referente a la creación de empleo
“Son palabras gruesas e insólitas (...) Es insultante para quienes ahora tienen un contrato indefinido, con derechos que antes no tenían”, ha afirmado el ministro en declaraciones a La Sexta recogidas por Europa Press. Escrivá ha insistido en que el “grueso” de los contratos indefinidos que se están firmando son ordinarios a tiempo completo, no fijos discontinuos, aunque ha indicado que éstos también tienen que crearse para cubrir actividades estacionales.
Desplome de la temporalidad
La temporalidad se ha desplomado a niveles históricos, llegando al 20,2% en junio de 2022. Desde enero de este año, la temporalidad ha caído siete puntos. Entre los menores de 30 años, el porcentaje de trabajadores con contrato indefinido ha subido en 27 puntos respecto al promedio de este mes, pasando del 37% al 64%.
El primer semestre de 2022 concluye con una creación de 262.935 empleos, descontando la estacionalidad y el efecto calendario. Respecto al nivel de empleo de hace un año, el crecimiento ha sido de 837.799 ocupados. Tras haber alcanzado el nivel de afiliación previo a la pandemia, el pasado mes de septiembre, se ha incrementado el empleo en 616.000 personas más. El dato implica que hay más de un millón de empleos que a comienzo de 2019.
El paro desciende en todas las comunidades autónomas a excepción de Andalucía donde se incrementa en 6.345 personas. Se nota el fuerte peso de la agricultura en esta comunidad. En el conjunto de empleo en el sector primario el desempleo aumenta en 8.863 personas, mientras que desciende en servicios 41.017 personas (-1,99%), industria 7.148 (-3,95%) y construcción 4.981 (- 2,15%). Los descensos del paro más acusados se han producido en Catalunya (-9.946), Comunidad de Madrid (-7.443) y Galicia (-5.188).
Por sexos, el desempleo femenino, baja en 17.167 personas (-0,99%) en relación al mes de mayo y se sitúa en un total de 1.723.815 mujeres, la cifra más baja en junio desde 2009. El paro masculino se sitúa en 1.156.767 al descender en 25.242 hombres (-2,14%). Si lo comparamos con junio de 2021, el paro masculino cae en 334.962 (- 22,45%) y el femenino baja en 398.795 (-18,79%).
Agentes sociales
La secretaria de Acción sindical y Empleo de CCOO, Mari Cruz Vicente, ha reclamado este lunes un “acuerdo global” con la participación de los agentes sociales, con medidas que acompañen a las tomadas en la reforma laboral, para seguir reduciendo el paro y consolidando el empleo de calidad.
“Estos datos laborales positivos están claramente impulsados por la reforma laboral”, ha subrayado Mari Cruz Vicente, a pesar de la difícil coyuntura por la elevada inflación, “que está lastrando el poder adquisitivo de los hogares y frenando el consumo”.
Mientras, UGT ha destacado que los datos del paro registrado del mes de junio reflejan la importancia del acuerdo laboral a la hora de mantener un ritmo elevado de creación de empleo y aumentar el número de contratos indefinidos.
Para el sindicato, los datos de paro del mes de junio amplían la tendencia positiva del empleo, ya que la creación de empleo mantiene un ritmo elevado (4,3% anual), encadenando así catorce meses de crecimiento ininterrumpido, y el porcentaje de contratación indefinida sigue alcanzando cotas muy altas.
Por su parte, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) han advertido de que se observan síntomas de cierta desaceleración en la caída del desempleo y han instado a “extremar las cautelas”.
La patronal ha advertido de que comparados con las series prepandémicas, se observan síntomas de cierta desaceleración en la caída del desempleo, lo que nos obliga a extremar las cautelas, más aún en un contexto de revisión a la baja de las expectativas de crecimiento económico que coincide además con el vencimiento de obligaciones contraídas durante la pandemia (devolución de créditos ICO).
“No pueden ignorarse tampoco el escenario internacional especialmente complejo derivado del conflicto bélico de Ucrania, el IPC desbocado y la escasez de algunas materias primas”, ha recordado la patronal a través de un comunicado.