Una petición lanzada por un grupo de eurodiputados verdes en la plataforma change.org para que la Comisión Europea investigue el escándalo de manipulación de gases de Volkswagen y analice las emisiones reales de “la totalidad de vehículos en el mercado europeo” supera ya las 60.000 adhesiones en un día.
Según los firmantes de esta petición, el caso, al que denominan “diéselgate”, “ha puesto de manifesto una realidad: las normas europeas que limitan las emisiones de los vehículos contaminantes no se cumplen”.
Para Florent Marcellesi, portavoz de Equo en el Parlamento Europeo, “no puede ser que las instituciones europeas estén al servicio de los intereses privados en detrimento de la salud de la ciudadanía. El sector del automóvil debe respetar la ley”.
La petición, lanzada por Marcellesí junto a otros once políticos ecologistas, considera que “más allá del caso Volkswagen, otros fabricantes están preocupados porque se ha hecho público el engaño: que las pruebas de emisiones actuales subestiman considerablemente las emisiones reales de los vehículos. De hecho, 1 de cada 10 vehículos diésel superan los niveles permitidos”.
“Como resultado, unos 40 millones de ciudadanas y ciudadanos europeos están hoy expuestos a un aire contaminado y peligroso, que contiene altos niveles de partículas finas y dióxido de nitrógeno, reconocidos como gravemente perjudiciales para la salud y el clima”.
Los promotores subrayan que el coste de esta contaminación “es enorme en términos humanos: hablamos de 400.000 muertes prematuras en Europa cada año. Por no hablar de la enorme carga financiera, ya que la contaminación cuesta cada año cerca de € 766 mil millones a la Unión Europea”.