El Partido Popular ha elegido una enmienda a los Presupuestos Generales de este año como la herramienta para aprobar un importante cambio legal para las trabajadoras del hogar. El PP pretende mantener –si salen adelante los Presupuestos– las bases de cotización de las trabajadoras domésticas por debajo de sus salarios hasta el año 2024, cuando la ley establece 2018 como el último ejercicio con este sistema en vigor. En la práctica, denuncian desde los colectivos de trabajadoras domésticas organizadas en el Grupo Turín, supone alargar “cinco años más la discriminación laboral” que perjudica a estas profesionales en sus jubilaciones futuras y sus prestaciones contributivas, entre otras cuestiones.
En la actualidad, las bases de cotizacion de las empleadas domésticas se sitúan en algunos casos por debajo de sus salarios. La Ley General de la Seguridad Social establece las bases y los tipos de cotización en el Sistema Especial para Empleados de Hogar, diferentes que los del Régimen General. “En el año 2012 la ley contempló una de las demandas de los colectivos de trabajadoras del hogar, que es que las cotizaciones de las empleadas se incorporasen a este Régimen General”, explica Natalia Slepoy, portavoz de Grupo Turín y del nuevo Observatorio 'Jeanneth Beltrán', que recoge abusos contra las trabajadoras del hogar.
De este modo, en 2012 se fijó el año 2019 como el primer ejercicio para que las bases de cotización de las trabajadoras se adaptaran al sistema del Régimen General. Es decir, que sus empleadores cotizaran por su remuneración mensual total y que se tuvieran en cuenta las bases mínimas de cotización establecidas cada año.
Hasta 2019, la ley estableció un acercamiento progresivo a este sistema, en el que las trabajadoras han cotizado por tramos de retribución. Por ejemplo, este 2018 las que cobran desde 196,16 hasta 306,40 euros al mes tienen la misma base de cotización, 277,51 euros. Ese sistema de cotización por tramos se ha ido actualizando desde 2014 según el incremento del salario mínimo pactado por ley.
Ahora el PP, a través de una enmienda que ha sido incluida en el dictamen de la Comisión de Presupuestos, pretende ampliar este sistema por tramos en la base de cotización hasta el año 2024. Según argumenta el grupo popular en el texto, el objetivo es “evitar una serie de efectos negativos que supondría su finalización el 31 de diciembre de 2018”. Entre ellos, “nuevas obligaciones para los empleadores de hogar” como el deber de comunicar las horas de trabajo al mes de las contratadas a tiempo parcial e informar si se producen variaciones en las retribuciones mensuales de sus empleadas.
Desde Comisiones Obreras denuncian que el PP se está saltando “el consenso de los agentes sociales y partidos políticos” con el que se aprobó la integración de las trabajadoras del hogar en el Régimen General, lamenta Enrique Martín, de la secretaría de Políticas públicas y Protección social.
Pensiones de incapacidad y jubilación
La enmienda también modifica el futuro de las pensiones de incapacidad permanente derivada de contingencias comunes y de jubilación. Esta es una de las modificaciones con mayor repercusión para las empleadas, en opinión de Enrique Martín, ya que supone un “retraso injustificable de acceso a algunos derechos, como a los mecanismos de solidaridad del sistema para compensar lagunas de cotización en las pensiones”.
La Ley de Seguridad Social fija este 2018 como el último año en el que solo se tienen en cuenta los periodos realmente cotizados de las trabajadoras del hogar para el cálculo de sus prestaciones. En la actualidad, estas profesionales están excluidas de la protección legal para los trabajadores del Régimen General frente a estos vacíos: se establecen unos mínimos de cotización para esos meses en los que no se haya cotizado.
El texto del PP pospone de 2019 a 2024 la integración de las trabajadoras del hogar a este sistema “ de solidaridad” del Régimen General. “Este mecanismo es muy positivo para el resultado de la pensón y no se les va a aplicar”, lamenta el representante de CCOO, que recuerda que es habitual que estas empleadas tengan algunos vacíos en sus carreras profesionales.
Además, la enmienda del PP también modifica los tipos de cotización (lo que se paga a la Seguridad Social) por contingencias profesionales, que asumen en su totalidad el empleador. El texto establece que tengan en cuenta las bases de cotización por tramos hasta 2023, cuando hasta ahora se alargaba solo hasta 2019.
“Alargar 5 años de discriminación”
Para el Grupo Turín, la emnienda del PP supone “un incumplimiento de los acuerdos firmados para equiparar los derechos de las trabajadoras de hogar” y denuncian que “ya han pasado casi 6 años desde la reforma en la que se fijaba la incorporación
progresiva al régimen general“.
“Que las bases de cotización se mantengan por debajo de los salarios es uno de los principales motivos que provoca que las prestaciones por incapacidad permanente y la jubilación sean tan bajas”, explica Natalia Slepoy.
Si existen retos en la información y documentación que deben asumir los empleadores, como justifica el Partido Popular para sustentar este cambio, “es responsabilidad de las autoridades públicas, para eso están las oficinas de información de la Seguridad Social”, sostiene Slepoy.
Las trabajadoras domésticas entienden que se puede proteger a los empleadores, con más información y bonificaciones a la cotización (que el Esatdo asuma parte del aumento en las cotizaciones), sin perjudicar y retirar derechos a las empleadas domésticas. “Porque ellas son trabajadoras y no se les reconocen todos sus derechos”, critica Slepoy.