Correos, la mayor empresa pública de España por plantilla, se ha borrado de la patronal CEOE y del Círculo de Empresarios, el lobby de ejecutivos de grandes empresas que periódicamente lanza propuestas como abaratar el despido (su última idea es implantar una única indemnización de 18 días por año trabajado), recortar impuestos y rebajar cotizaciones sociales.
La baja de Correos de esas dos organizaciones está recogida en su último informe anual, que refleja unas pérdidas récord de 153 millones de euros en 2018 como consecuencia de una reclamación de la Comisión Europea por ayudas públicas ilegales del Estado. La salida se ha producido este año, tras el aterrizaje en la empresa pública de Juan Manuel Serrano, ex jefe de gabinete de Pedro Sánchez nombrado presidente con polémica hace un año.
Correos, según el grupo estatal, ha salido de CEOE tras constatar la nueva dirección que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), el hólding de empresas públicas del que depende, ya formaba parte de la confederación empresarial. Esa presencia por duplicado, explican, no tenía sentido. Respecto a la salida del Círculo de Empresarios, del que no forma parte SEPI, “responde a una decisión empresarial” tomada por “criterios de eficiencia” y “en función de los intereses de la compañía” que, recuerda Correos, tiene carácter público y recursos “limitados”.
Correos sigue perteneciendo a, entre otras, AUTELSI (Asociación Española de Usuarios de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información), y patronales que pertenecen a CEOE como Ametic (Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información, Telecomunicaciones y Contenidos Digitales) y UNO (Organización Empresarial de Logística y Transporte).
Correos se adhirió a CEOE y al Círculo en época de su anterior presidente, Javier Cuesta, nombrado por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012. A CEOE se incorporó en abril de 2014 por considerar entonces que la confederación era el “entorno natural” de una compañía cuya plantilla y cifra de negocios supera las de muchas firmas del Ibex 35. Actualmente, están adheridas a la patronal, además de la SEPI, empresas con participación estatal como Aena, Bankia o Indra, cuyo mayor accionista es el hólding estatal.
Baja en febrero
En el caso del Círculo de Empresarios, según fuentes de la asociación, Javier Cuesta se asoció a la entidad en nombre de Correos en 2016, cuando estaba presidida por Javier Vega de Seoane, sucesor de la polémica Mónica de Oriol. Serrano cursó su baja en febrero pasado y, tras la reciente salida de otra empresa estatal, Paradores (presidida por el socialista Óscar López), El Círculo se ha quedado sin asociados del sector público.
El anterior presidente de Correos aún figura como socio de la asociación bajo la figura de “cuota cero”, reservada a personas con una determinada antigüedad aunque actualmente no tengan una vinculación empresarial concreta.
El Círculo de Empresarios se define como una organización sin ánimo de lucro cuyo fin principal es “el estudio, la divulgación y promoción de la función de la libre empresa, del papel del empresario y de la importancia del espíritu emprendedor, en una economía de mercado y como factores esenciales del progreso económico y social, al servicio del bien común y en beneficio de quienes en la empresa trabajan, de los inversores, de los proveedores, de los clientes y de los consumidores”.
La entidad se financia exclusivamente con las cuotas de sus socios, que a 11 de marzo de 2019, ascendían a 230, según su web. Las cuotas oscilan entre los 2.000 y los 15.730 euros anuales, en función, fundamentalmente, del número de empleados de las compañías vinculadas a los socios.
En octubre de 2012, el Círculo, que entonces presidía Mónica de Oriol, publicó un documento en el que señalaba que empresas públicas “como Aena, Renfe, ADIF o Correos, deben gestionarse con criterios empresariales” y llevar a cabo “una profunda reestructuración de sus actividades, plantillas y activos, para que sean viables en el futuro”.
Ese “colosal reto de gestión” debía abordarse “antes incluso de cuestionarse su estructura de capital”. En el caso de Aena, el Gobierno del PP acabó privatizando un 49% de su capital a un precio muy inferior al que luego ha tenido en Bolsa.
El actual presidente del Círculo de Empresarios es John de Zulueta, expresidente de Sanitas, que en su primera entrevista en ese cargo, hace un año, advertía de que la función de los empresarios es molestar al Gobierno: “No nos metemos en política, pero si no molestamos al Gobierno de turno no estamos haciendo nuestro trabajo”, decía Zulueta, que la semana pasada abogaba por una gran coalición entre PSOE, PP y Ciudadanos para acabar con la actual parálisis política.