El Rey se ha reunido hoy de pie en el Salón de Audiencias de la Zarzuela con los catorce integrantes del Consejo de Administración de Enagás, presididos por Antonio Llardén, con quienes ha tratado los proyectos nacionales e internacionales de esta compañía en la actual coyuntura de crisis económica.
Don Juan Carlos, que avanza en su recuperación de la operación de cadera a la que se sometió a finales del pasado noviembre, se ha ayudado de dos muletas para caminar en el Salón de Audiencias, pero ha prescindido de una de ellas antes de saludar, uno a uno, a sus catorce invitados, junto a quienes ha posado para los medios gráficos antes de departir con ellos a puerta cerrada.
Entre los integrantes del Consejo de Enagás figura Marcelino Oreja Arburúa -hijo del conocido exministro de Asuntos Exteriores y excomisario europeo-, que ocupa el cargo de consejero delegado en la empresa gasista y a quien el Rey ha comentado antes de la reunión, en tono distendido, que, en la actual fase de su recuperación, le conviene utilizar por lo menos una muleta.
Durante esta audiencia, concedida con ocasión del 40 aniversario de la constitución de Enagás, los integrantes del Consejo de Administración que preside Llardén -y al que se acaba de incorporar como consejero independiente Jesús David Álvarez Mezquíriz- han tenido oportunidad de exponer al Monarca las perspectivas de negocio y los principales retos que afronta la compañía gasista.
Enagás, que cumplió en 2012 diez años desde su salida a Bolsa, donde cotiza el 85 por ciento de su capital, se encarga de la construcción, gestión y mantenimiento de la red de gasoductos existente en España y cuenta con tres accionistas institucionales, propietario cada uno de un 5 por ciento: la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Kutxabank y Oman Oil Holdings.
La compañía posee cerca de 10.000 kilómetros de gasoductos por todo el territorio español, tres almacenamientos estratégicos subterráneos (en Vizcaya, Huesca y Guadalajara) y cuatro plantas de regasificación, en Barcelona, Cartagena, Huelva y Gijón.
En 2011 inició su actividad internacional con la adquisición del 40 por ciento de la planta de regasificación TLA Altamira, en México, a la que siguió la compra del 20 por ciento de la terminal GNL Quintero, en Chile.
Además, dispone de conexiones internacionales con Francia desde 1991 y con Marruecos y Argelia desde 1996, a través del gasoducto Magreb-Europa, que une la red española con los yacimientos argelinos de Hassi R'Mel, por lo que las noticias relacionadas con el desenlace del ataque terrorista a una planta gasista argelina figuraban hoy entre las cuestiones de interés para Enagás.
Llardén, que ya fue recibido por el Rey hace seis años al frente del Consejo de Enagás tras su nombramiento, fue uno de los empresarios que acompañó a Don Juan Carlos en su visita de trabajo a Chile de junio de 2012 y también uno de los que participó hace unos días en la tercera edición del “Spain Investors Day”, un foro organizado en Madrid con el fin de atraer nuevos negocios a España.