“Esto parecía casi imposible en mayo, cuando todo empezó”, nos dice en una cafetería frente a la puerta de la Audiencia Nacional un activista de 15MPaRato, que como siempre exige hablar como colectivo y evitar nombres y apellidos. “Nuestro plan era que Rato se tuviera que ir de España o que fuera condenado en un plazo de cinco años. Han pasado solo ocho meses y ahí está, declarando como imputado”. No contiene la sonrisa.
Desde dentro de la cafetería se escuchan los gritos de unas 20 personas que reciben entre protestas al imputado 32, el expresidente de Bancaja José Luis Olivas, el penúltimo en pasar por la sala del juez Andreu antes de que lo haga Rodrigo Rato mañana a partir de las 16.30 horas. Media hora antes, una concentración convocada a las puertas del tribunal promete una tarde ruidosa.
En una pequeña sala, Rato recibirá preguntas únicamente del fiscal y alguna matización del juez. Los abogados de UPyD y 15MPaRato, que representan la acusación particular, no podrán interpelar al también exdirector gerente del FMI, que como imputado puede elegir no contestar a las preguntas de los demandantes. Como el resto de citados, no lo hará.
“La pregunta que yo les quiero hacer y no puedo es: ¿dónde está el dinero?”, dice el abogado Juan Moreno Yagüe, que representa a 15MPaRato en el proceso y que ha vivido casi todas las declaraciones. Sus previsiones del resultado de la comparecencia de Rato son prudentes: “Yo intuyo que Rato dirá que la culpa no es suya, que la responsabilidad es del Banco de España”, anticipa. “Pero todos son responsables, todos sabían que las cuentas estaban mal cuando Bankia salió a bolsa. Y en realidad yo creo que algunos que no estaban en el día a día pensaron, bah, ya se arreglará y todo siguió para adelante”.
Algunos citados, como el presidente de la patronal de empresarios, Arturo Fernández, se desentendió de la gestión y derivó la culpa a la empresa auditora de las cuentas, la gigante multinacional Deloitte. “Es absurdo: la responsabilidad no puede recaer sobre un agente externo sino sobre quien le contrata y, por tanto, es responsable de su correcto funcionamiento”, apunta el abogado. Aún así, “está saliendo información muy interesante, porque todos coinciden que el diseño de la salida a bolsa fue diseñado por el Banco de España y orquestado Rato”, asegura.
La tesis que 15MPaRato defiende es que “las entidades bancarias ya están quebradas, pero se está retrasando que se haga efectivo para poder pagar la deuda con los bancos extranjeros; cuando esté todo pagado, entonces se dejará caer los bancos que tengan que caer”. Según esta teoría, “por eso Alemania no quiere que se inyecte dinero directamente a los bancos, porque si luego la justicia dice que ese dinero debe ir las víctimas de una estafa, o el banco quiebra, ellos no cobran la deuda”.
El juez que instruye el caso es Fernando Andreu. “Estamos contentos con él, la verdad”, dice el abogado, que está en parmanente contacto con la otra acusación particular impulsada por UPyD. “En este caso, tenemos confianza en la justicia, aunque la verdad es que ellos cuentan con el BOE a su favor”. ¿Eso qué significa? “Pues que han aprobado una ley en noviembre y un decreto en agosto para darle al FROB mucho poder y responsabilidad sobre las entidades y blindar así a los bancos ante los tribunales”.
Los costes de mantener una representación legal en todo el proceso se pagan con los 17.344 euros recaudados en la campaña de crowdfunding iniciada en goteo.org. En la web del colectivo puede verse el presupuesto de cómo prometen gastarse el dinero y facturas justificantes: unos 6.000 € para el trabajo del equipo jurídico; 1.000 euros para pagar al procurador; otros 3.000 para alojamiento y desplazamiento de abogados, testigos y víctimas... Precisamente ellos, los accionistas querellantes, serán los protagonistas ahora que termina la ronda de imputados. “En realidad, ahora es cuando empieza el juicio”, nos dice el portavoz de 15MPaRato.
La segunda parte del juicio, la que empieza ahora, es también la hora de las pruebas. La campaña contra Rato, secundada por nodos y grupos muy influyentes del 15M, también hizo un llamamiento para recabar información confidencial que pudiera poner en aprietos a los consejeros de Bankia. ¿Guardan alguna sorpresa? “Sí. Nos ha llegado información que nos hace ser optimistas y pensar que los 33 imputados serán condenados”, aseguran.