Hernández de Cos, partidario de analizar cuál es el nivel óptimo de concentración bancaria

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha declinado este martes hacer comentarios sobre la oferta de fusión del BBVA al Banco Sabadell, aunque se ha mostrado partidario de analizar cuál sería el grado óptimo de concentración bancaria, dado el incremento que se ha producido en los últimos años.

“Ni puedo ni debo hacer comentarios sobre una potencial operación que involucra a dos entidades significativas. Nunca los supervisores hablamos de entidades individuales y no lo voy a hacer en esta ocasión”, ha afirmado el gobernador sobre el intento de fusión del BBVA, en la que ha sido su última comparecencia en el Congreso, ya que el próximo junio finaliza su mandato.

No obstante, Hernández de Cos ha señalado que es evidente que en la economía española se ha producido un incremento del nivel de concentración, en particular en el sector bancario, que “antes se situaba por debajo de la media de Europa y ahora lo supera”, y ha considerado que éste “es un buen momento para prestarle atención a cuál es el nivel óptimo”.

“No tengo hoy una respuesta, pero creo que es importante analizarlo. Es una cuestión que hay que analizar”, ha subrayado durante su comparecencia, en respuesta a la portavoz de ERC, Inés Granollers, que le ha trasladado su “preocupación por le nivel d competencia en el sector bancario”.

El gobernador le ha dicho que el nivel de competencia corresponde analizarlo a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y que lo que a él le preocupa es que el nivel de concentración sea muy elevado.

También ha apuntado que para avanzar hacia una unión bancaria las fusiones transfronterizas serían una manera de hacerlo y que en ese contexto el mercado relevante ya no seria exclusivamente el doméstico, por lo que habría que incorporarlo al análisis.

Por su parte, el portavoz de Sumar en la Comisión de Economía, Carlos Martín, ha opinado que, más que la concentración, lo que debería preocupar es el “tamaño” de las entidades de crédito en España, el cual ha considerado una “anomalía” en la UE, y ha abogado por poner un límite a ese tamaño en porcentaje sobre el PIB. EFE