Banco Santander ha planteado a los sindicatos el despido de un máximo de 1.200 empleados de la plantilla del banco en España, lo que supone una reducción del 5% de los trabajadores, según han informado fuentes sindicales. El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado por el banco presidido por Ana Botín llega tras la decisión, anunciada el pasado jueves por la noche, de cerrar unas 450 oficinas en España y reestructurar los servicios centrales de Santander España.
No obstante, esta primera cifra de 1.200 afectados aportada por la entidad a los sindicatos se podría rebajar hasta el momento en el que las partes alcancen un acuerdo definitivo. Las fuentes consultadas han concretado que la entidad ha fijado el punto de partida de la negociación en 600 prejubilaciones y otras tantas bajas incentivadas. La Federación de Servicios de UGT ha informado en un comunicado de que las prejubilaciones propuestas serían desde los 58 años, con el 70% de salario bruto anual, mientras que las bajas incentivadas contemplan una indemnización de 40 días por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades.
No obstante, esta primera cifra aportada por la entidad a los sindicatos se podría rebajar a medida que transcurran las negociaciones entre las partes para alcanzar un acuerdo definitivo. Desde Comfia-CC.OO. estiman que el cierre de oficinas planteado no debería implicar un recorte de personal de más de 900 empleados y además que las prejubilaciones tendrían que suponer al menos el 75% del ajuste total.
Las negociaciones
Los sindicatos acudían a la reunión con la dirección, que ha arrancado a las 11.00 horas y se ha prolongado durante dos horas y media, con total disposición a negociar. Los representantes de los trabajadores insisten en que el plan de reducción de empleo debe ser “muy similar” al acordado para absorber Banesto. En ese caso, la entidad ofreció prejubilaciones desde los 55 años, cobrando el 80% del salario, y bajas incentivadas ofreciendo 50 días de indemnización por año trabajado, según han recordado fuentes sindicales.
El próximo viernes, 8 de abril, el banco presentará a los sindicatos la propuesta para los servicios generales del banco de la Ciudad Financiera del Santander en Boadilla del Monte (Madrid).
“Este proceso tiene que estar basado en la voluntariedad y rechazamos cualquier medida traumática para la plantilla del banco”, ha asegurado UGT, mientras que Comfia ha pedido a la entidad su “compromiso” con la plantilla. “Deben garantizarse condiciones favorables”, han reivindicado los sindicatos.
La dificultad del negocio bancario para generar ingresos con los tipos de interés en el 0% en la zona euro y la irrupción de la tecnología están provocando un nuevo ajuste en empleo y oficinas en el sector financiero español. Las inminentes fusiones entre entidades parecían la vía para ganar eficiencia y reducir costes, aunque sus aplazamientos ante la incertidumbre política están forzando a acometer estos ajustes con anterioridad a otra vuelta de tuerca en el mapa bancario.
Este mismo martes, Banco Ceiss planteaba también una reducción de plantilla de hasta 1.120 puestos de trabajo. Hace apenas un mes, la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) estimaba que la reducción del negocio acentuará los ajustes sufridos por el sector financiero durante la crisis. Así pues, calculaba que los recortes adicionales ante el nuevo panorama bancario implicarán el cierre de unas 3.000 oficinas y una reducción de plantilla de otros 14.688 empleados hasta 2019.