Los socios del Gobierno arropan a Escrivá pero piden un giro del Banco de España hacia familias y pymes

Daniel Yebra

4 de septiembre de 2024 21:42 h

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Los socios del Gobierno arropan el nombramiento del ministro José Luis Escrivá como gobernador del Banco de España, pero también le dejan una lista de 'deberes' para su mandato, que se extenderá seis años. ERC, PNV o Podemos, y también Sumar, esperan que la institución tome una dirección más social. Un giro hacia las familias y las pymes.

Hasta 2030, Escrivá liderará las tareas de supervisión bancaria y de análisis económico que tiene encomendadas el Banco de España en el ámbito doméstico y representará a nuestro país en el BCE, que decide la política monetaria de toda la eurozona.

Este miércoles, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, defendió la elección de su compañero de gabinete en la comisión del ramo del Congreso de los Diputados —lo describió como el candidato “idóneo”— y respondió a las reacciones de los grupos parlamentarios.

Frente a las críticas del PP sobre su falta de independencia tras formar parte de los dos gobiernos de coalición, los grupos parlamentarios del PSOE y de Sumar (que son parte del Ejecutivo), ERC o PNV (que apoyaron la investidura de Pedro Sánchez) coincidieron en que la procedencia de la política “no puede ser una mácula” para acceder a una institución y que el criterio debe ser “la profesionalidad”, y el candidato “lo cumple”. Ni Junts ni Bildu (los otros socios de la investidura) estuvieron presentes en la comisión.

“Es un mal servidor público”, denunció por su parte Eduardo de Olano, portavoz del PP, quien puso de ejemplo la reforma de las pensiones que Escrivá impulsó como ministro de Seguridad Social o el desarrollo del Ingreso Mínimo Vital (IMV). “¿Cómo será el próximo informe del Banco de España sobre el sistema de pensiones?”, preguntó. “¿Qué informe hará sobre los Presupuestos Generales?”.

Cuerpo aseguró que la independencia de la institución está garantizada por la Ley de Autonomía del Banco de España, y los socios del Ejecutivo de coalición asintieron, con matices.

“Aunque estamos cumpliendo la legalidad [el nombramiento del gobernador corresponde al presidente del Gobierno], habría un mayor control si fuera este Parlamento [el Congreso] el que nombrase al gobernador”, señaló el portavoz de Sumar, en apoyo a la misma propuesta previa de la representante del PNV en la comisión, Idoia Sagastizabal.

“Porque tampoco nos engañemos, la independencia de los bancos centrales [del poder político] tiene una connotación negativa. Tiene cierto origen en que la 'máquina de hacer dinero' no se la podemos dejar a los representantes del pueblo porque a lo mejor la utilizan en exceso”, añadió Martín Urriza, de Sumar.

En su turno final, Sagastizabal quiso incidir en “que el futuro gobernador mantenga una relación con los grupos parlamentarios”, y en “que ayude con los retos económicos que tenemos por delante”. En la misma línea, Inés Granollers, de ERC, emplazó al gobernador a comparecer en esa comisión.

“Estaremos para recordarle que, aparte de la independencia y del buen hacer profesional, también esperamos que se avenga a políticas sociales, que el resultado económico del país irá en función de las condiciones que se presten a las pymes, a los comercios, los autónomos, al sector agrario, a las empresas familiares, porque no podemos caer en el mismo error de destinar recursos públicos para salvar la banca”. “Ya hemos visto cuáles han sido los resultados”, destacó la diputada catalana.

A Sagastizabal le preocupa especialmente que Escrivá “mantenga la seriedad, el prestigio y la confianza de la institución”. Martín Urriza remarcó que su preocupación se centra en la independencia con la que Escrivá se va a posicionar respecto a la política monetaria, que decide el Banco Central Europeo (BCE), en cuyo consejo de gobierno se sentará desde la próxima semana, y que actualmente beneficia a Alemania —como país acreedor neto— y a los bancos —cuyos beneficios se han disparado con las subidas de los tipos de interés— y perjudica a las familias hipotecadas y a las pequeñas y medianas empresas de España.

“El futuro de muchas familias o el futuro de los jóvenes también pasa por encontrar un crédito para poder comprar una vivienda o para realizar sus estudios”, comentó la representante de ERC.

El portavoz de Sumar enumeró otras de sus reivindicaciones de los últimos años al Banco de España. Primero, la necesidad de un mercado de productos financieros más transparente, que favorezca la “portabilidad” de hipotecas en un contexto de tipos de interés altos como el actual. Segundo, el fomento de la competencia en un sector bancario excesivamente concentrado que no ha elevado la rentabilidad de los depósitos lo suficiente en comparación con otros países europeos ni en términos históricos en este ciclo de incrementos del 'precio' del dinero.

El grupo parlamentario de Sumar viene denunciando desde hace meses que las ganancias extraordinarias de las entidades financieras no se deben a “una mejor gestión” ni al aumento del crédito —éste se ha contraído fuertemente—, y deben redirigirse “a recapitalizarlas y mejorar su solvencia” y a compensar a las familias y empresas dañadas por la austeridad monetaria del BCE.

El propio Banco de España se ha posicionado reiteradamente en contra de la principal medida del Gobierno de coalición para atajar esta situación: el gravamen temporal a la banca. El acuerdo para formar el Ejecutivo entre el PSOE y Sumar incluye precisamente convertir este gravamen extraordinario en un impuesto regular.

Javier Sánchez Serna, de Podemos, se detuvo en “la creciente desigualdad en la riqueza, impulsada por el poder de la gran banca y los fondos de inversión. En España tenemos un oligopolio bancario que se ha forrado con el beneplácito de instituciones como el Banco de España”.

El ministro de Economía admitió que el Banco de España y el BCE se enfrentan a grandes retos. “Los países de la eurozona tenemos grandes debates. El primero, definir el rumbo de la política monetaria, con el reto de favorecer la moderación precios en un aterrizaje 'suave' de la economía”, es decir, sin provocar una crisis, en la jerga económica.

Los sindicatos avalan a Escrivá

Por su parte, los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, avalaron este miércoles el nombramiento de Escrivá y creen que será independiente.

Álvarez destacó que ha demostrado “méritos más que sobrados para presidir” el Banco de España, y se mostró convencido de que será un “magnífico” gobernador. “Y creo que eso no es una cuestión solo del PSOE, porque el PP también tiró de él para presidir la AIReF”, subrayó el líder de UGT, algo que también recordó Sordo.

Además, el secretario general de CCOO indicó que no le ve “grandes pegas” de independencia a Escrivá “por su forma de ser y de interpretar” las cosas, pero admitió que quizás convendría regular este tipo de pasos de la política a ciertas instituciones.