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A Tesla le llueven problemas: aranceles en la UE, tala de 500.000 árboles en Alemania y su camión sale ardiendo

No es el momento más brillante de Tesla. El gigante de los coches eléctricos lleva un año en el que ha tenido que anunciar miles de despidos y ha protagonizado una huelga histórica en uno de los mercados europeos donde los vehículos enchufables están más arraigados, Suecia.

Y este verano, suma y sigue. La compañía fundada por el multimillonario Elon Musk ha visto cómo la Comisión Europea va a introducir aranceles a las ventas de sus vehículos en la UE, donde además está perdiendo fuelle como marca de coches eléctricos más vendida. A eso, además, añade la polémica de haber talado cerca de medio millón de árboles para la construcción de su fábrica en Alemania y los problemas de su camión en Estados Unidos.

El último contratiempo le ha llegado de Bruselas. La semana pasada, el Ejecutivo comunitario confirmó que Tesla va a estar entre las compañías del sector que tendrán un arancel porque, al fabricar las baterías de sus coches en China, se beneficia de las ayudas que concede el Gobierno de ese país. En su caso, el arancel será del 9%, significativamente inferior al de otros competidores del gigante asiático. Por ejemplo, en el caso de BYD o Geely los aranceles llegan al 17% y el 19,3%, respectivamente.

Ese 9% para Tesla aún no es definitivo, porque las empresas tienen dos semanas de plazo –a contar desde el pasado 20 de agosto– para presentar alegaciones y luego se abre el plazo de consultas con los Estados miembros. La decisión final de Bruselas se conocerá el 30 de octubre. Y a partir de ahí se sabrá con certeza cuándo se aplican los aranceles.

De entrada, tendrán una vigencia de cinco años, aunque pueden ser prorrogados si se considera que China sigue inyectando fondos a los fabricantes de coches y baterías para hacerlos más competitivos que sus rivales 'made in Europe'. 

A la espera de conocer esos detalles, que previsiblemente encarecerán el precio de sus modelos, las ventas de Tesla en Europa ya están sufriendo. En el mes de julio, el grupo alemán BMW ha superado por primera vez a la empresa estadounidense como fabricante de eléctricos líder en ventas, según los datos que publica la consultora especializada en automoción Jato Dynamics. Las diferencias no son muy altas: 14.869 vehículos BMW eléctricos matriculados en julio, frente a los 14.561 de Tesla. Pero sí reflejan que las automovilísticas europeas arañan terreno. 

Además, que el resto de fabricantes se hayan puesto las pilas no es algo que le suceda solo en Europa. En Estados Unidos, hasta ahora, Tesla había vendido más eléctricos que todos sus competidores juntos. Sin embargo, los últimos datos publicados en ese país indican que las distancias se acortan.

En un año (de mayo de 2023 al mismo mes de 2024) el grupo encabezado por Musk vendió 618.000 eléctricos en su mercado doméstico frente a los 597.000 que suman las demás compañías, lo que indica que su dominio casi absoluto está perdiendo tirón, y no solo porque los modelos chinos sean más baratos, también por la competencia de otros fabricantes más tradicionales, como General Motors. 

En este escenario, Tesla optó por bajar precios. En España, unos 2.000 euros por modelo. Sin embargo, eso no ha sido suficiente para inyectar oxígeno a sus ventas y a su cuenta de resultados. En el segundo trimestre del año, los ingresos de la multinacional por la venta de coches se redujeron un 7%, hasta 19.878 millones de dólares (cerca de 17.800 millones de euros al cambio actual). Y su beneficio se hundió un 45%, hasta 1.478 millones de dólares.

En la presentación a inversores reconoce que estos malos datos se deben a que vende menos coches de todos sus modelos (3, S, X e Y), que tiene más gastos por el proceso de reestructuración en el que está inmersa –en abril anunció 14.000 despidos– y porque está gastando más en distintas partidas de inversión, entre otras, en inteligencia artificial.

Crisis medioambiental en Alemania 

Al margen de los datos económicos, Tesla se enfrenta a un daño reputacional. La construcción de su fábrica en Alemania, cerca de Berlín, ya ha conllevado la destrucción de alrededor de medio millón de árboles. En concreto, las imágenes satelitales de la zona donde está la planta señalan que, entre marzo de 2020 y mayo de 2023, se talaron 327 hectáreas de bosque, según la información publicada por The Guardian.

Esa fábrica de Tesla ya ha sido foco de críticas por parte de las asociaciones de protección del medioambiente, como contamos en este tema, en una 'gigafactoría' que solo lleva operando un par de años pero que está en proceso de ampliación, con el objetivo de duplicar la producción y llegar al millón de vehículos anuales. 

Musk ha sido crítico con la actuación policial en estas protestas y lanzó la pregunta a través de su red social, X (antiguo Twitter) de por qué se dejaba en libertad a los manifestantes tan fácilmente.

Además, la tala de árboles no es la única crítica medioambiental que ha suscitado la fábrica germana. También, que su operativa conlleva el uso de una significativa cantidad de agua, porque las autoridades locales le han permitido el uso de hasta 1,5 millones de metros cúbicos cada año. 

El primer accidente de su camión eléctrico

Tesla no solo tiene problemas con sus coches, también con su camión eléctrico. La National Transportation Safety Board, la agencia de seguridad en el transporte de Estados Unidos, ha abierto una investigación por el accidente de un Tesla Semi, un vehículo de transporte que lleva piezas desde la fábrica de Reno (Nevada) a la de San Francisco (California) y que acabó ardiendo en una carretera, aunque sin provocar víctimas.

El Semi, que aún no está a la venta pero que Tesla usa para sus transportes, solo emplea baterías de litio. En este suceso, el camión estuvo ardiendo durante cuatro horas, lo que ha llevado a abrir esta investigación por las implicaciones que pueden conllevar que ardan estos modelos, dado que se calcula que un camión de este tipo lleva las baterías equivalentes a la suma de 10 de sus coches eléctricos. 

Tesla asegura, al detallar las especificaciones del camión Semi, que este puede cargarse en hasta un 70% en una media hora y que permite un ahorro de hasta 200.000 dólares en tres años. 

El incendio recuerda a otros accidentes de Tesla con su sistema de conducción asistida, el Autopilot. A finales del año pasado, el mismo regulador de seguridad vial de Estados Unidos le obligó a revisar este sistema de conducción, que emplean casi dos millones de coches, tras estudiar los riesgos de posibles accidentes y analizar casi 1.000 siniestros.