El exministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, ha publicado una nota rápida en su blog con las primeras valoraciones del durísimo acuerdo alcanzado entre Grecia y la troika.
Varufakis, que sigue siendo diputado por Syriza en el Parlamento griego, dice que se “reserva su juicio”, hasta escuchar de primera mano cómo discurrieron las negociaciones por boca del primer ministro, Alexis Tsipras y de su sucesor en el Gabinete, Euclides Tsakalotos. Pero no se priva de dar sus primeras impresiones sobre el comunicado final de la cumbre de líderes.
En los términos en los que está redactado el comunicado, Varufakis asegura que suena a “derrota” y a convertir a Grecia en un “vasallo” del Eurogrupo. “La cumbre no tuvo nada que ver con economía”, asegura el exministro en su breve reflexión. “Es simple y llanamente una manifestación de la política de humillación en acción”, sentencia con dureza. “Incluso si se odia a nuestro Gobierno, uno debe ver que la lista de demandas del Eurogrupo se desvía de la decencia y la razón”, concluye.
En opinión de Varufakis, la cumbre del euro ha sido “la culminación de un golpe de Estado”.“En 1967 los tanques de los gobiernos extranjeros acabaron con la democracia griega” recuerda quien ha estado al frente de las finanzas griegas durante seis meses que cree que ahora se han sustituido los tanques por los bancos griegos. “La principal diferencia con aquel golpe es que la propiedad estatal no estaba en el punto de mira”, remarca el griego que cree que ahora los nuevos golpistas sí quieren echar mano a los bienes públicos para poder atender con ellos el pago de los intereses de “una deuda impagable e insostenible”.
“El acuerdo anula completamente la soberanía nacional, sin poner en marcha un órgano supranacional, y paneuropeo por encima. Los europeos, incluso aquellos a los que no les importa nada Grecia, deben estar informados de esto”, sentencia.
Varufakis retoma la idea de que las condiciones impuestas a Grecia son una suerte de “tratado de Versalles”. Según el profesor, “nunca antes la Unión Europea había tomado una decisión que dinamitara tanto el proyecto de integración europea” y cree que en la fórmula en la que se ha tratado a Tsipras y al Gobierno de Syriza han sido clave en esta destrucción.
“El proyecto de integración europea ha sido herida de muerte en los últimos días”, ha recalcado en su nota el economista que se ha apoyado en la opinión del Nobel de Economía, Paul Krugman para decir que no han sido los griegos los responsables de matar la idea de una Europa unida y democrática.
Explotando su lado academicista, que tanto parecía molestar a sus colegas de Eurogrupo, Varufakis cita a Nick Kaldor, un economista de Cambridge que ya en 1971 advirtió de que forjar una unión monetaria antes que una unión política conduciría al fracaso. “Bruselas, Berlín y Fráncfort han conspirado para demostrar que tenía razón”, lamenta.
Varufakis asegura que no se debería estar prestando tanta atención a si el Parlamento griego va a aprobar o no el paquete de medidas. “La pregunta clave es: ¿Tiene la economía griega alguna posibilidad de recuperarse en estos términos”. “Esto es lo que debe preocupar a los parlamentarios estos días. Si una rendición completa va a llevar a un agravamiento de la crisis”.