Un buen líder es aquel que consigue empujar y motivar a un grupo para que lo siga. A lo largo de la historia hemos conocido a numerosos líderes que con su gran capacidad de convocatoria han logrado movilizar a la masa y realizar importantes cambios revolucionarios, como Clara Campoamor o Martin Luther King. Pero no todos los líderes poseen grandes cualidades positivas, acuérdate de Hitler.
Tener capacidades y habilidades de líder es muy importante en el terreno laboral, bien su tienes tu propia empresa o si quieres convertirte en jefe en un futuro o bien estás al mando de un equipo de trabajo.
¿Un líder nace o se hace? Muchas personas nacen con cualidades innatas que facilitan el liderazgo, pero no te preocupes si ese no es tu caso porque con la preparación adecuada puedes adquirir las habilidades necesarias para lograrlo. Da igual que nunca hayas dirigido un equipo de trabajo, todos en algún momento hemos tenido que ejercer el liderazgo, ya sea en el trabajo, en la vida familiar o social, así que algo de experiencia tienes.
El aspecto fundamental para convertirte en un referente para los demás y en buen líder al que seguir es el “respeto”, según Javier Caparrós, director general de Trabajando.com España. “El respeto se gana respetando a los demás, pero también trabajando las relaciones laborales, una buena comunicación y con honestidad y confianza en tu equipo”.
El liderazgo es un conjunto de cualidades que un individuo tiene para que el resto de personas trabajen con entusiasmo en el logro de un objetivo común. La comunidad laboral de Universia y Trabajando.com analiza las cualidades de cuatro distintos tipos de liderazgo que existen actualmente en las empresas:
- Liderazgo participativo. Este guía toma las decisiones de forma conjunta, preocupándose siempre de la opinión de su equipo y aceptando su colaboración. De esta manera, hace a todos partícipes de sus logros y fracasos, estimulando las capacidades de cada uno. Su principal objetivo es crear un espíritu de equipo donde cada integrante se sienta valorado. Por tanto, este tipo de liderazgo fomenta un ambiente laboral sano, positivo, motivador, lo que beneficia la imagen de la empresa. Según Trabajando.com y Universia, este tipo de liderazgo es necesario adoptarlo cuando es importante el trabajo en equipo y cuando la calidad se impone a la rapidez de sacar las tareas adelante.
- Liderazgo burocrático. Aquí las tareas se realizan siguiendo muy de cerca las normas establecidas. Apenas existe comunicación entre el líder y sus subordinados, ya que la forma de trabajo se basa en las políticas de la empresa.Así se fomenta un alto nivel de control, un ambiente poco social y un alto apego a los reglamentos. Este tipo de liderazgo se encuentra, principalmente, en empresas donde existe algún riesgo serio de seguridad ya que trabajan con sustancias químicas o pesadas, cuando se manejan grandes cantidades de dinero o cuando se tienen que tomar medidas especiales.
- Liderazgo carismático. Este tipo de guías con su energía y entusiasmo sobresalen del resto y además de motivar a los demás los inspira con su estilo de vida. Utiliza la alegría y el positivismo como una forma de motivar y disminuir el estrés del equipo. Por tanto, este tipo de liderazgo es necesario en ambientes de mucho trabajo y tensión.
- Liderazgo autoritario. Éste es totalmente opuesto al participativo, ya que los demás deben acatar las órdenes pero nunca cuestionarlas. De ahí que no se preocupe de la opinión de su equipo. Aunque este tipo de liderazgo es anticuado e impacta negativamente en la motivación de las personas, es común encontrarlo en personas con poca o nula preparación en gestión de equipos. Aunque no es recomendado, algunos expertos lo ven importante en momentos crisis donde hay que tomar decisiones duras y rápidas en beneficio de la compañía.
Tras leer las cualidades de los principales tipos de liderazgo, ¿qué tipo de líder eres tú? No te preocupes si no te gusta la respuesta, aún estás a tiempo de convertirte en uno que tome la iniciativa y consiga motivar a su equipo de forma eficaz.