Cómo organizar el primer viaje 'bikepacking': los diferentes tipos de bolsa para transportar la carga

Erkuden Almagro

13 de junio de 2022 21:46 h

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Sentir el viento en la cara, el frescor de la mañana, el brillo del sol, el sonido de las ruedas al deslizarse… Somos muchos los ciclistas a los que, además de hacer nuestras rutas habituales, nos gusta salir de viaje en bicicleta. Hasta ahora para transportar nuestra impedimenta usábamos las alforjas tradicionales, esas que se colocan en una parrilla o portabultos en la parte trasera o delantera de la bici, una a cada lado de la rueda. Pero de un tiempo a esta parte han llegado al mercado unas bolsas que están revolucionando el concepto de viajes en bici.

Antes, si preparabas un viaje, daba igual que fuera de un fin de semana o de dos semanas, debías montar una parrilla a la bici y cargarla con las alforjas. Ahora no todas las bicis tienen la opción de aceptar una parrilla convencional y debes montar una parrilla adaptada. Las hay de diferentes marcas, pero este es un sistema costoso y algo incómodo. Ese tipo de portabultos te limita las zonas por donde vas a ciclar, debiendo elegir carreteras poco transitadas, sin opción a rutas más pisteras o montañeras por lo incómodo que es el traqueteo, pues las parrillas sufren muchas fuerzas y vibraciones, los tornillos se aflojan e incluso se pueden llegar a romper. Además, generan más resistencia al aire. 

Lo que sí puedes colocar en todo tipo de bici son las bolsas de 'bikepacking', término que viene a significar “mochilas para la bici”. Son bolsas de diversos tamaños que se anclan a la bicicleta en sus huecos, aprovechando todo el espacio posible. 

Si nos preguntamos de dónde viene esta modalidad debemos remontarnos casi a los inicios de la bici, pues ya en el siglo XIX las bolsas de 'bikepacking' eran usadas por los cicloturistas y hasta por los soldados de ejércitos de todo el mundo para cargar sus equipajes y desplazarse por zonas de montaña y llano con toda su impedimenta a cuestas. 

Digamos que el 'bikepacking' es la versión minimalista del cicloturismo, versión que te permite viajar más ligera, recorrer zonas más divertidas para la bici aportando sensaciones más parecidas a lo que hacemos en nuestras salidas habituales. 

Se puede hacer 'bikepacking' con bicis de montaña, carretera y gravel, estas últimas muy asociadas a este nuevo fenómeno. El 'bikepacking' es el formato ideal para iniciarse en un viaje en bici. Si estas pensado en una escapada de fin de semana de las que te proponemos en la revista, no pierdas detalle. 

Podemos encontrar todo tipo de bolsas que se ajustan en mayor o menor medida a la bici. Las hay de tija, de cuadro, de tubos horizontal o de manillar y todas ellas de diferentes capacidades según nuestras necesidades. Se sujetan a la bici con correas ajustables y/o velcros haciendo muy sencilla su colocación alineando la carga al eje longitudinal para evitar que se mueva y desequilibre y sin generar resistencia al aire.

'Frame bag' o bolsa de cuadro

Esta bolsa es la más accesible de todas. Se coloca en el tubo horizontal del cuadro por encima y en ella es común meter cosas que vayas a necesitar en ruta como algo de comida de picoteo, documentación, teléfono o los repuestos por si pinchas.

La capacidad del modelo que te mostramos es de 2 litros por bolsa, y sus medidas son 20 X 15 X 15 cm, con un peso de 120 gramos.

'Dry large frame bag' o bolsa de cuadro

Esta bolsa se coloca en el tubo perpendicular al eje de pedalier, por la parte de abajo. En ella se suele llevar el material más pesado, como las herramientas, la bomba para hinchar las ruedas, batería externa para el móvil o GPS, frontal, botiquín o agua de reserva. Al colocar el material más pesado en la parte central de la bici conseguimos equilibrar la bici y bajar el centro de gravedad. Suelen tener unos cuantos compartimentos para que lleves todo bien organizado. 

Las hay que cubren todo el hueco del cuadro, teniendo que portar los bidones para el agua en otro sitio, como por ejemplo en manillar en unas bolsas específicas.

Contiene elementos reflectantes y se adapta a cualquier medida del cuadro. Sus dimensiones son 37/30 X 12 X 5, pesa 150 gramos y su capacidad es de dos litros. 

'Dry handlebar bag' o bolsa de manillar

Esta bolsa es muy cómoda para colocar, constando de dos piezas. Una es un arnés con elementos reflectantes que se sujeta al manillar mediante velcros ubicados en tres puntos, quedándose fija durante todo el viaje. La bolsa en sí es totalmente estanca con costuras termo-selladas y es de capacidad ajustable gracias a su cierre enrollable. 

En esta bolsa se suelen llevar las cosas que vayas a necesitar al llegar a tu destino cada día, la ropa de pernocta o de recambio, mudas, toalla, neceser, plumífero, etc. Además, se pueden colocar bolsas adicionales al arnés sin ocupar espacio dentro de la bolsa lo que te da un extra de espacio. Sus dimensiones son 43 x Ø17 cm, pesa 300 gramos, con volumen de 10 litros .

'Sadde bag bike-packer' o bolsa de sillín

Sin duda es la bolsa de más capacidad. Lo más común es de 18 litros pero las hay más grandes o incluso más pequeñas, para usar a diario. Aquí debes tener cuidado a la hora de elegir la medida de la bolsa, ya que, si tienes bici con cuadro pequeño, te puede llegar a pegar en la rueda trasera y se va desgastando la bolsa.

Tiene tres puntos de sujeción, uno de ellos a la tija del sillín. Se colocan unas tiras bajo los raíles del sillín y se ajusta con un cierre cada lado. Para que quede estable debe estar bien ajustado de ambos lados con las cintas laterales. En la parte superior lleva unas gomas ideales para sujetar ropa que te va sobrando en la jornada, o las zapatillas para usar tras bajarte de la bici. 

En esta bolsa lo ideal es guardar la ropa del día siguiente, ropa de abrigo o para la lluvia que puedas necesitar en la ruta. Es muy plegable y se debe enrollar bien para que se mantenga estable y en equilibrio. Tienes elementos reflectantes y puntos para colocar la luz trasera. Sus dimensiones son 20 x 20 x 47 cm y pesa 355 gramos. 

'Dry fork bag' o bolsa de horquilla

Por último, si tu viaje es más largo de 2-4 días o necesitas llevar más equipaje, tienes la posibilidad de llevar en cada barra de la horquilla un acople para llevar esta otra bolsa. 

Tiene un soporte que se ajusta a la horilla con unas bridas de quita y pon. La bolsa es totalmente estanca y va genial para llevar el saco de dormir o la esterilla si es de las hinchables que ocupa poco espacio o incluso un mini hornillo de cocina. Hay auténticas miniaturas como este kit de cocina. 

 La bolsa se ajusta al soporte con dos cintas ajustables. A destacar que esta bolsa cuenta con una válvula para evacuar el aire y que todo vaya más comprimido ocupando menos espacio. Tiene una capacidad de 3,5 litros y sus dimensiones son 12,5 x 12,5 x 27 cm.

Unas recomendaciones prácticas:

  • Llevar el peso repartido entre la bosa delantera y trasera para que las dos ruedas soporten el mismo peso y estén bien equilibradas. 
  • El material que vayas a usar durante la ruta es mejor llevarlo a mano en la bolsa de cuadro o la trasera, de tal manera que no tengas que tocar nada en la bolsa delantera de manillar. Esta debe ir bien colocada entre ambos extremos del manillar para evitar descompensaciones. 
  • Colocar un film protector en el cuadro antes de sujetar las bolsas que van a al cuadro u horquilla para evitar que se rayen las superficies con el rozamiento. 
  • Elige la ruta y en función de donde vayas a dormir. Si vas de hotel u albergue, necesitarás menos capacidad y por lo tanto menos bolsas. Si vas de acampada, debes gestionar bien los espacios para ubicar todos los materiales, incluida la tienda de campaña. En estos casos puedes usar una monoplaza que pesa menos de un kg y es muy cómoda de transportar en cualquiera de las bolsas. ¿Has pensado ya cual será tu próxima aventura en bicicleta?

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