Finaliza por segundo día la búsqueda del migrante desaparecido en las aguas del Bidasoa, en la frontera de Francia en Irún

Un amplio dispositivo de emergencias busca desde aproximadamente las 18.30 horas de este sábado a un joven de raza negra en las aguas del río Bidasoa, que hacen de frontera natural entre Irún y Hendaya, entre España y Francia. Según las primeras informaciones, tres migrantes en tránsito habían intentado evitar los controles policiales en la muga cruzando por el río. Dos de ellos han sido ya localizados en la orilla francesa pero el tercero no ha aparecido. Se maneja la hipótesis de que haya fallecido ahogado.

Este domingo a las 8.30 horas la Ertzaintza ha confirmado a este periódico que el operativo se reiniciará tras el parón nocturno. En las primeras horas se halló una prenda y una mochila. Estas fuentes indican que se trabaja con un aviso que hablaba de un grupo de tres personas, aunque se analiza también como segunda hipótesis que fueron objetos perdidos por los dos migrantes que sí lograron cruzar a nado. En el operativo participan la Ertzaintza, las Fuerzas de Seguridad del Estado y otros cuerpos de emergencias y rescate, así como también efectivos franceses.

Las labores de búsqueda, sin embargo, se han suspendido sin éxito a las 18.30 horas de este domingo, coincidiendo con la puesta de sol. Los servicios de emergencias las reanudarán a eso de las 8.00 horas de este lunes, con las primeras luces. Fuentes de la Ertzaintza indican que no ha habido ninguna novedad reseñable en todo el domingo. En un comunicado, el Ejecutivo ha agradecido la “implicación” de todos los agentes sobre el terreno y ha destacado las “temperaturas gélidas, el caudal de agua elevado y las fuertes mareas” que condicionan el trabajo. “Cabe recordar que en noviembre de 2021, cuando se produjo la última muerte de un migrante tratando de cruzar el Bidasoa, su cuerpo no apareció hasta nueve días después de morir ahogado”, se apunta desde el Gobierno.

Devoluciones en caliente

Son ya casi cinco años en que la Policía Nacional francesa ha levantado un muro para evitar la entrada a la República de migrantes en tránsito. Practica devoluciones en caliente. Ello ha incrementado la presencia de mafias en la zona fronteriza que se lucran a costa de quienes quiere acceder a Francia, así la como la exploración de rutas alternativas cada vez más peligrosas. Tres personas han fallecido ya en aguas del río Bidasoa en los últimos meses. En este caso, el punto en el que han intentado nadar está entre los puentes de Behobia y Biriatou.

Se da la circunstancia de que este mismo viernes el lehendakari, Iñigo Urkullu, y su homólogo de los territorios vascos de Francia, Jean-René Etchegaray, así como los alcaldes de Irún y de Hendaya, realizaron un homenaje a los migrantes en el puente de Santiago, uno de los que unen España y Francia. Arrojaron una flor al Bidasoa y apelaron a los derechos humanos en un punto que es espacio Schengen.

Ni siquiera la solidaridad creciente para la acogida de refugiados de Ucrania que huyen de la guerra -y que tienen en Irún uno de sus puntos de llegada- ha hecho desaparecer el muro invisible que suponen para las personas procedentes de África los controles de la Policía Nacional francesa. Operarios de Cruz Roja expresaron al propio Urkullu su preocupación por esta situación que se perpetúa e indicaron que están haciendo grandes esfuerzos para alertar de lo arriesgado de nadar en el Bidasoa. Aunque la distancia entre orillas es corta en algunos puntos, se trata de un espacio de fuertes corrientes, hasta el punto que es lugar de entrenamiento de piragüistas de aguas bravas.

Según recoge Europa Press, el director de Migración y Asilo del Gobierno Vasco, Xabier Legarreta, ha reclamado este domingo a la luz de estos hechos que se implementen corredores humanitarios tanto “para las personas que llegan de África como para las que en estos momentos tienen que salir de Ucrania”, sin distinciones.