Los cinco individuos que fueron arrestados el pasado domingo en Vitoria tras cometer un robo en el centro comercial Garbera de Donostia, darse a la fuga y herir a diez ertzainas en un enfrentamiento pertenecen a un grupo criminal procedente de Madrid, según ha confirmado el jefe de la Ertzaintza, Josu Bujanda. Bujanda ha explicado los detalles de la operación realizada por la Ertzaintza tras el robo en el centro comercial Garbera. Los cinco detenidos están acusados de los delitos de robo con fuerza, atentado a agentes, hurto y delito contra la seguridad vial, y han ingresado en prisión en la tarde de este martes.
Además, Bujanda, que ha indicado que la Ertzaintza investiga la implicación de una sexta persona, ha afirmado que, “sin duda”, se trata de “un grupo organizado criminal que viene de Madrid”. También ha dicho que investigan si un robo que se produjo en el mismo centro comercial “lo pudieron hacer los mismos, sobre todo, basándonos en el modus operandi”. Según ha recordado Bujanda, sobre las siete menos cuarto de la madrugada del pasado domingo se produjo un robo en una tienda de elementos y materiales electrónicos en el complejo comercial de Garbera, en Donostia.
Tras ser alertados por la seguridad del propio centro comercial, los agentes de la Ertzaintza que acudieron al lugar comprobaron que los presuntos ladrones habían huido, por lo que se alertó a todos los recursos disponibles en ese momento en el turno de trabajo y a todas las comisarías. Los agentes comprobaron que los autores se habían desplazado hasta el comercio en dos vehículos, a los que les habían colocado matrículas que habían sustraído la víspera a otros coches aparcados en Vitoria, constando además que uno de los vehículos que utilizaban también estaba robado. Desde ese momento, la Ertzaintza estableció un dispositivo de vigilancia que permitió localizar a los implicados una hora después cuando circulaban a gran velocidad a la altura de Vitoria por la A-1, según recoge Europa Press.
Los presuntos autores del robo trataron de huir de la Ertzaintza circulando en dirección contraria tanto por la A-1 y la N-622. Los agentes lograron interceptarles a la altura de Abetxuko, arremetiendo estos con gran violencia contra los vehículos policiales. Cinco hombres, de 38, 31, 33, 35 y 38 años de edad, fueron detenidos acusados de los delitos de robo con fuerza, hurto, atentado a agentes y contra la seguridad vial. Los cinco arrestados se resistieron de manera violenta a la detención, resultando heridos diez ertzainas. Cuatro agentes tuvieron que ser ingresado en centros hospitalarios, uno de ellos en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Según ha relatado Bujanda, los presuntos autores “circularon en sentido contrario y embistieron con los coches de los ertzainas que estaban intentando detener a los vehículos”, con “la desgracia de tener diez ertzainas heridos de diversa gravedad”. En ese sentido, ha informado de que el agente estaba ingresada en la UCI, ya ha pasado a planta y ha confiado en que “en poco tiempo pueda estar en su casa”. Bujanda ha destacado “la profesionalidad con la que han actuado y han desarrollado su labor y, en este caso, las detenciones y toda la incidencia, de todos y cada uno de los estzainas que participaron en la misma”.
Por otro lado, ha recordado que no es la primera vez que ocurren este tipo de incidentes en la Ertzaintza, aunque el del pasado domingo “ha podido ser el más grave, por el número de heridos de ertzainas que desgraciadamente hemos tenido y el número de detenidos”. “Intentos de fuga con embestimientos a los vehículos policiales y, en algún caso, con algún herido de ertzainas hemos tenido”, ha reiterado, para asegurar que los procedimientos están “operativos y funcionan, como han funcionado en este caso”. Tras afirmar que, “como toda organización”, intentarán mejorar, ha insistido en que los procedimientos y protocolos que tiene el cuerpo son los “adecuados para este tipo de incidencias”.