Euskadi abre el 7 de febrero la matriculación y seguirá obligando a los centros a reservar plazas a “vulnerables”

El Departamento de Educación ha publicado ya el reglamento para la admisión de alumnado en Euskadi de cara al curso 2024/2025. El área que dirige Jokin Bildarratz insiste en que los requisitos son “idénticos” a los del pasado año, de modo que por segunda ocasión se mantiene la obligatoriedad de que todos los centros, también los privados concertados, dispongan de una reserva de plazas para alumnado “vulnerable”. Para saber cuántas son se fijan unos parámetros para un área geográfica determinada. Asimismo, existen unos sistemas de puntos en función de la cercanía al colegio o de la presencia o no de otros hermanos allí que se emplean para valorar posibles excesos de demanda. Históricamente, en la comunidad con menos peso de la red pública, un 50%, aquí se había concentrado el mayor volumen de este tipo de estudiantes. Sin embargo, hace doce meses las ikastolas privadas alzaron la voz contra este sistema al entender que “sus” alumnos -aunque nunca hubiesen estado matriculados allí- iban a ser derivados a otros centros.

¿Cómo se determina qué alumno es vulnerable? Euskadi va a repetir también el procedimiento. El año pasado se ofreció un cuestionario. Como recogió este periódico en febrero de 2023, ese documento lleva por título 'Cuestionario sobre necesidades específicas de apoyo educativo' e indica que “es necesario responder a todas las preguntas”. El primer apartado explora en los niveles académicos de los progenitores, y el siguiente enumera las profesiones posibles desde “miembros del poder ejecutivo y cuerpos legislativos” como primera opción a “ocupaciones militares” como última. ¿Qué datos hay que rellenar? Pregunta 7 en 2023: “¿Cuántos libros hay en su casa, aproximadamente? En un metro de estantería caben alrededor de 50 libros. No tenga en cuenta las revistas o los libros de texto”. La siguiente pregunta interpelaba por si en el hogar hay conexión a Internet, por si se disponen de “enciclopedias o diccionarios”, por si en esa estantería descuellan Axular, Rosalía de Castro, Miguel de Cervantes, William Shakespeare o Gloria Fuertes, por si hay periódicos, revistas o suscripciones a medios de comunicación digitales o si se paga alguna suscripción a “Netflix, HBO o Amazon Prime”. Se demandaba también el número de 'smartphones', tabletas, ordenadores y 'e-books', pero también el de cuartos de baño y dormitorios. Frente a la polémica y a la posibilidad de que las encuestas fueran mal rellenadas deliberadamente en lugar de recurrir a datos reales de renta, por ejemplo, Educación insistió en que eran datos estandarizados.

“En suma, tanto la planificación de la oferta como los mecanismos que regulan la admisión deben contribuir a una distribución equilibrada de la diversidad y de la vulnerabilidad entre todos los centros sostenidos con fondos públicos, a fin de evitar la segregación del alumnado por razones socioeconómicas o de otra naturaleza”, argumenta Educación en la documentación publicada este lunes en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV). También se compromete a evitar la “sobreoferta”, es decir, que colegios concertados puedan lanzar más plazas que las necesarias en detrimento de la pública.

Así las cosas, la novedad más relevante es el propio calendario. La presentación de solicitudes se iniciará el 7 de febrero y habrá plazo hasta el 23 de ese mes. Educación promete los listados provisiones de admitidos para el 26 de marzo y disponibles para su consulta hasta el 10 de abril. Las listas definitivas se esperan para el 26 de abril.Antes habrá un plazo de reclamaciones y después recursos ante las delegaciones territoriales de Educación. Se irán haciendo campañas oficiales de comunicación para ofrecer más información al respecto.