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El Parlamento Vasco pospone los primeros plenos de la legislatura de Pradales a finales de septiembre

Vista del último pleno en el Parlamento, que terminó con la investidura de Imanol Pradales como lehendakari

Iker Rioja Andueza

Vitoria —

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La Mesa del Parlamento Vasco ha definido y publicado ya un calendario de trabajo para los próximos meses. Ha convocado un pleno ordinario para el 26 de septiembre y una sesión de control al Gobierno para el día siguiente, el viernes 27 de septiembre. En el primer caso, la última jornada con debates y votaciones de leyes, mociones y resoluciones se celebró el 22 de febrero. En el segundo caso, los consejeros del Ejecutivo y el propio lehendakari no responden a interpelaciones de la oposición desde el 16 de febrero. En uno y otro caso habrán pasado más de siete meses sin actividad ordinaria en la Cámara. Antes, como enero había sido inhábil, tampoco se habían celebrado más de media docena de plenos en 2024.

¿Qué ha ocurrido? El mismo 22 de febrero, por la tarde, el entonces lehendakari, Iñigo Urkullu, disolvió el Parlamento y convocó elecciones para el 21 de abril. Desde entonces, se paralizó la celebración de plenos y comisiones. Los comicios se celebraron en la fecha prevista y el 14 de mayo se constituyó la nueva legislatura. Se eligió a la Mesa aquel día. Un mes largo después, los días 20 y 22 de junio, se celebraron las sesiones de investidura de Imanol Pradales como nuevo lehendakari. En medio, hubo algunas sesiones de trámite que duraron (literalmente) segundos. Constituido el Gobierno, se optó por no celebrar plenos y comisiones antes de las vacaciones de verano. Esto no ha impedido que en estos meses todos los parlamentarios estén cobrando el complemento salarial correspondiente a las dietas por desplazamientos. Son 370 euros mensuales para los electos alaveses, 543 para los vizcaínos y 596 para los guipuzcoanos.

Los meses “inhábiles”

Es tradición que el Parlamento Vasco, como dicta el reglamento, pare todo julio y todo agosto y que solamente opere con normalidad a partir de la segunda quincena de septiembre. También es “inhábil” salvo mandato expreso el mes de enero después del parón de Navidad. No es lo más común. Los Parlamentos forales, las Juntas Generales, o los legislativos de Navarra y otras comunidades, así como las Cortes Generales, tienen paradas mucho más reducidas. Esto ha implicado que, por ejemplo, la elección de los tres escaños del Senado que corresponden por designación autonómica a Euskadi lleve parada desde mediados de junio, cuando se conocieron sus nombres. Eso sí, no afecta en nada al día a día de la Cámara alta porque repetirán en sus puestos los tres mismos electos de la pasada legislatura, Estefanía Beltrán de Heredia por el PNV, Idurre Bideguren de EH Bildu y Alfonso Gil del PSE-EE.

De momento, se acumulan 25 propuestas de la oposición pendientes de su debate y resolución hasta, como poco, finales de septiembre. Algunas iniciativas pendientes tienen que ver con medidas para reducir las listas de espera en Osakidetza, para frenar las derivaciones sistemáticas a la privada de los abortos, para impulsar la declaración de zonas tensionadas de vivienda, para definir la nueva tasa turística o el nuevo servicio de Cercanías de Álava o incluso sobre menores extranjeros a instancias de Vox.

En todo caso, unos días antes, en la semana del 16 de septiembre, arrancará ya el día a día en el Parlamento. Está previsto que desde ese día comparezcan uno por uno los quince consejeros del Ejecutivo de Pradales para que detallen las líneas maestras de cara a la legislatura 2024-2028. Todos ellos, los diez del PNV y los cinco del PSE-EE, han enviado ya la petición para acudir a la Cámara. La más madrugadora fue la titular de Educación, Begoña Pedrosa. Lo hizo el 10 de julio. El último, Mikel Jauregi, titular de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad.

Se prevé que para septiembre estén listas las simbólicas obras de reforma del hemiciclo que van a cambiar su configuración tradicional. La bancada reservada al Gobierno tenía catorce asientos como máximo y no cabía en ella el nuevo Gobierno de Pradales, de dieciséis integrantes y el más extenso de la democracia. Ya es conocido que la institución gastará 47.496,23 euros en montar este verano dos escaños y en realizar otros ajustes.

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