El PNV de Álava insiste en que la corrupción de tres de sus exdirigentes eran “asuntos particulares”

El presidente del Araba Buru Batzar del PNV, José Antonio Suso, ha ofrecido en Radio Vitoria este viernes su primera entrevista desde que se conoció la sentencia del Tribunal Supremo que confirma la corrupción de tres exmiembros de esa misma dirección del partido en Álava, Alfredo de Miguel, Koldo Ochandiano y Aitor Tellería. Aunque Suso formaba parte de un sector claramente contrario al de los condenados -hay pruebas en el sumario de cómo lo insultaban-, el actual dirigente del PNV no ha cargado las tintas y ha mantenido estrictamente el argumentario que está empleando el partido en los últimos días.

Ha señalado que simplemente “había miembros del partido en esta situación”, en referencia al cobro ilegal de comisiones, y que es patente que el partido no aparecía “ni como beneficiario ni como actor”. Preguntado expresamente por el silencio de quien fue su predecesor en el cargo y presidente con De Miguel, Ochandiano y Tellería, Iñaki Gerenabarrena, ha recalcado que la posición del ABB la marca él y que, como Iñigo Urkullu y Andoni Ortuzar, pide disculpas a la sociedad por el hecho de que unos “asuntos particulares” de antiguos miembros del PNV hayan resultado sancionados penalmente. “Van en contra de la ética que defendemos en este partido”, ha afirmado. Gerabarrena, como De Miguel, trabaja para la sociedad pública autonómica Hazi.

Y ha aprovechado para cargar contra otros partidos que están señalando las responsabilidades del PNV. Entiende que es “precampaña electoral” y aprecia “intentos” por erosionar sus siglas. Pero ha recordado que han pasado más de trece años desde que se conocieron los hechos y que “ha habido muchas elecciones” en las que el partido no ha salido mal parado. En otro momento de la entrevista ha enfatizado que la suya es la principal organización de Álava. “La ciudadanía ha visto cómo actuamos”, ha enfatizado Suso recordando que incluso se cambiaron los estatutos internos para facilitar la separación de sus puestos de posibles nuevos procesados por corrupción a raíz del 'caso De Miguel'.

Suso ha explicado también que no tenía apenas relación con De Miguel y los demás cuando estaban en activo, como tampoco la ha tenido en los últimos años o una vez conocida la sentencia. En la época reciente, de hecho, apenas han coincidido en un acto social en la Rioja Alavesa, adonde el ex 'número dos' condenado acude con regularidad aunque ya se llevó su residencia de Álava a Bizkaia cuando se inició la investigación.