Koro Segurola (Usurbil, 1962) es licenciada en Filología Vasca por la Universidad de Deusto y cuenta con un amplio currículum en el estudio del euskera. Desde 1986 ha formado parte de la Real Academia de la Lengua Vasca (Euskaltzaindia) y actualmente es la primera mujer directora de la revista Egan que se publica en euskera desde 1948 de forma ininterrumpida.
Segurola describe la revista Egan como un “oasis en el desierto”. “En el contexto de oscuridad franquista de entonces, una revista en euskera, en su sencillez, era un paso influyente que daba esperanza, ya que en aquel desierto un sencillo árbol era también un opulento oasis”, sostiene.
Han pasado 75 años desde entonces y hoy en día los retos de Egan y también los del euskera, han cambiado. Entre los objetivos de la revista está lograr una mayor visibilidad y actualizarse a los nuevos tiempos, mientras que la meta del euskera, según la académica, es que se den pasos firmes para aumentar su conocimiento y uso.
Ha trabajado en Euskaltzaindia desde 1986. ¿Cómo describiría su carrera en la Real Academia de la Lengua Vasca?
Entré por oposición en la Academia como encuestadora para el Atlas Lingüístico en euskera que tiene el título Euskararen Herri Hizkeren Atlasa. Entré para hacer esa investigación y trabajé en ella durante 23 años, pero también he trabajado en otros proyectos, como en la historia social del euskera bajo la dirección de Joseba Intxausti y en el Diccionario Histórico-Etimológico de la Lengua Vasca bajo la dirección de Joseba Lakarra.
La Real Academia Española cuenta con el reto de ir adaptando la lengua a los nuevos tiempos, algo que en muchas ocasiones se ve como un debate sobre todo entre los académicos más tradicionales. ¿En Euskaltzaindia pasa lo mismo?
Sí. En el Diccionario de Euskaltzaindia según se van produciendo nuevas formas se estudian y se investigan, se analiza su contexto y se ve la conveniencia de introducir o no esas nuevas palabras en el diccionario. Después de cierto tiempo se vuelve a hacer una revisión de qué recorrido han hecho esas palabras y se toma una decisión sobre si impulsarlas o no.
A diferencia del castellano, el euskera como tal no tiene género. ¿Facilita eso la llegada del lenguaje inclusivo?
En euskera no existe el género gramatical, como en español o francés, pero en los verbos alocutivos (en hitano) aparece el género, y también en el léxico, en algunas definiciones relacionadas con el parentesco o dinastías. La sociedad va cambiando y, inevitablemente, el diccionario también tiene que adaptarse. Partiendo de esa premisa, el diccionario de Euskaltzaindia ha modificado algunas definiciones adecuándolas a una concepción de la sociedad menos sexista. Por ejemplo, “nuera” (errain), antes era ‘la mujer del hijo’, y hoy se define como ‘la mujer del hijo o de la hija’. Se han revisado también ejemplos, sobre todo en lo referente al tema de igualdad; es decir, se reordenan algunas acepciones en función de los usos actuales. Las Academias no pueden vivir fuera de los cambios de la sociedad.
Hay que seguir profundizando e intensificar las políticas lingüísticas en determinados ámbitos, hace falta una revisión del sistema educativo y trabajar los cambios de hábitos lingüísticos
El próximo 3 de diciembre es el Día del Euskera. ¿En qué situación se encuentra el euskera a día de hoy?
El camino recorrido ha sido ejemplar, algo que muchas otras lenguas minorizadas no han conseguido. Por un lado, el número de euskaldunes, el nivel de alfabetización, la producción cultural y modernización de la lengua son mayores que nunca, pero por otro lado, la diferencia entre el conocimiento y el uso es cada vez mayor. La calidad de los hablantes es a menudo regular y el apego también. Por todo ello, en los últimos años se está hablando de la encrucijada que vive el euskera. Parece que el euskera se ha estancado y hay que dar pasos más firmes para el conocimiento y el uso del euskera. Otra de las cuestiones que preocupan también es que el idioma de pasos atrás viendo las últimas sentencias contra el euskera. Hay que seguir profundizando e intensificar las políticas lingüísticas en determinados ámbitos. Hace falta una revisión del sistema educativo y trabajar los cambios de hábitos lingüísticos, entre otros desafíos.
En cuanto al sistema educativo, ¿cómo cree que puede afectar o favorecer la reforma de la Ley de Educación al euskera?
No he podido revisar lo relativo a la nueva Ley de Educación así que preferiría no comentar nada al respecto hasta poder revisarla.
Es directora de la revista literaria Egan desde 2017 que se publica desde el año 1948 como único espacio que tenia el idioma para estar presente en la vía pública. ¿Qué supuso para la sociedad vasca?
La revista está ligada a la vida de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País desde su propia fundación, hay que confesar que en el año 48 en la inmediata posguerra española la aparición de Egan en su seno significó un cambio en su anterior rumbo deficiente respecto al hecho lingüístico vasco. Fue básica la labor del filólogo Koldo Mitxelena o también del académico Juan San Martin. Por otra parte, supuso un eslabón fundamental en la literatura moderna vasca, especialmente bajo la dirección de Mitxelena. En un primer momento la revista es bilingüe y nace con la mirada puesta en los jóvenes para aglutinar y alentar las inquietudes literarias de la juventud. A partir de 1953 comienza una nueva andadura y la única condición que se pone entonces para publicar en la revista era que fuera en euskera. La revista ha sido el testigo en esa época de la verdadera renovación de la lengua vasca en lo referente a la unificación y, en el ámbito literario, publica artículos que van desde el hiperrealismo hasta corrientes más universales como el existencialismo, la poesía social y narrativa.
¿Desde el régimen franquista nunca pusieron dificultades a la hora de publicar la revista íntegramente en euskera?
Habría que hacer una investigación a fondo para saber si hubo alguna barrera a la hora de publicar algún número, pero la revista Egan nació al amparo de la única institución cultural vasca no prohibida por el franquismo, la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País.
¿Qué diferencias hay entre esa Egan de la posguerra primero y el franquismo después, y la de hoy en día?
En el contexto de oscuridad franquista de entonces, una revista en euskera, en su sencillez, era un paso influyente que daba esperanza, ya que en aquel desierto un sencillo árbol era también un opulento oasis. Y aquel Egan de hace 70 años, íntegramente en euskera, no era un árbol cualquiera, como lo demuestra el nombre de los autores que lo crearon y lo escribieron en él. Pero donde antes sólo eran pequeños oasis abundan hoy día numerosos bosques, entre los cuales Egan quiere ser capaz y digno de dar su sombra. Hemos hecho un gran esfuerzo por renovar la revista, pero es difícil en una comunidad lingüística como la nuestra, y en una lengua minorizada, y con la presencia de diferentes tecnologías mantener el prestigio, la calidad y visibilidad de la revista. Nuestro siguiente objetivo es lograr una mayor visibilidad, intentando que la revista esté en un mayor número de bases de datos y repositorios, esa es nuestra apuesta. Ahora estamos ya en Latindex (una red o un sistema en línea para revistas científicas…) y en otros sistemas o base de datos. Hemos digitalizado todos los números de Egan desde el primero en el año 48 hasta el día de hoy y se pueden consultar de forma gratuita.
La revista Egan nació al amparo de la única institución cultural vasca no prohibida por el franquismo
Usted es la primera mujer en dirigir la revista Egan. ¿Qué papel han jugado las autoras en la historia de la revista?
Soy la primera mujer como responsable o directora, pero las revistas son trabajos en equipo y hay otras tres mujeres en mi equipo. En los seis años que llevo como directora hemos hecho mucho trabajo en digitalizar y actualizar la revista y lo cierto es que no nos ha dado tiempo a realizar una investigación para saber cuántas escritoras o autoras han escrito en Egan durante estos 75 años. Lo tenemos pendiente. Lo que sí que te puedo asegurar es que en estos seis años en los que hemos publicado 11 números y dos monografías han escrito unos 26 escritores y entre ellos la mitad más o menos, unas diez, son mujeres.
La revista cumple este año su 75 aniversario. ¿Cómo lo van a conmemorar?
Coincidiendo con mi lección de ingreso como Amiga de Número en Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País, en junio, al finalizar el acto y para conmemorar el aniversario, Juan Luis Zabala escritor y miembro del comité de redacción dio una conferencia sobre “la creación literaria en la revista Egan”. La publicaremos en el siguiente número de la revista. Ahora estamos preparando un seminario, para principios del año siguiente, con tres conferencias y una mesa redonda sobre las revistas literarias vascas (y las periferias), la aportación de los trabajos literarios de Egan y demás revistas desde la década de los 50 y la influencia de la revistas literarias en la modernización de la literatura y en los movimientos literarios.