La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Los sindicatos denuncian que Osakidetza se desprenderá de 2.200 contratados temporales a los que no puede estabilizar

Belén Ferreras

Bilbao —
28 de septiembre de 2023 18:44 h

0

Los sindicatos SATSE, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT han denunciado este jueves que Osakidetza se plantea la finalización de 2.200 contratos temporales de larga duración que están en puestos estructurales, pero que asegura que no puede estabilizar. Según les ha confirmado la dirección del Servicio Vasco de Salud durante la reunión de la mesa sectorial de negociación, se trata de puestos de trabajo que no tienen código para formar parte de la plantilla estructural. “En vez de codificar esas plazas, va a dar por finalizados esos contratos, lo que equivale al cese de esos trabajadores y trabajadoras, la desaparición de esos puestos y a que la plantilla sea todavía más escasa”, denuncian. Es algo que consideran que es especialmente grave cuando la tasa de temporalidad de Osakidetza se acerca al 50%.

Se trata de contratos que están a punto de cumplir los tres años de temporalidad, por lo que con lo que con la nueva ley de medidas para deducir la temporalidad, conocida como la 'Ley Iceta', deberían estabilizarse. Sin embargo, Osakidetza asegura que se trata de puestos que no tienen códigos para ser estructurales, lo que en la práctica supone, según las centrales, una clara reducción de la plantilla. La elevada temporalidad de la plantilla ha sido uno de los puntos que se han tratado este jueves en la mesa, que los sindicatos han vuelto a calificar de “vacía de contenido”. “Más allá de buenas palabras, Osakidetza y el Departamento de Salud siguen sin tener una voluntad real de negociar y abordar las cuestiones troncales que afectan a la plantilla de Osakidetza”, concluyen.

Desde Osakidetza han recordado a través de un comunicado que se van a estabilizar más de 11.000 plazas en su plantilla, “la más amplia de su historia, a través de los procesos de las OPEs 18-19 y OPE 20-21-22 y Estabilización”. Ha señalado, además que el Servicio Vasco de Salud recurre a la contratación temporal en diferentes categorías profesionales “en función de las necesidades de atención a la ciudadanía y de circunstancias especiales como son los periodos vacacionales y la reciente emergencia sanitaria causada por la COVID-19”. “Y, en ningún caso, prescinde de las personas con perfiles críticos para la prestación sanitaria”, han señalado.

Los sindicatos volvieron a la mesa sectorial en junio pasado, después de ocho meses de ausencia, pero consideran que “se siguen sin abordar los problemas reales”. En este sentido, han denunciado que la parte social había solicitado la inclusión en el orden del día la negociación de un nuevo acuerdo regulador de condiciones de trabajo, “que lleva 14 años sin renovarse”, pero Osakidetza “ha decidido unilateralmente no incluir ese punto en el orden del día bajo la excusa de que es un tema de mucha enjundia” y han optado dejarlo para próximas reuniones.

Representantes de los sindicatos se han concentrado ante la sede de Osakidetza en Vitoria durante a reunión para “denunciar el maltrato sistemático al que Osakidetza somete a su plantilla”, entre otras cuestiones “con el desastre en la gestión de los procesos selectivos y de provisión”, dicen. En este sentido, han denunciado las “largas colas, de varias horas durante el mes de agosto en los diferentes hospitales para hacer entrega de la pertinente documentación” para presentarse a la OPE. Recuerdan que Osakidetza ha convocado la OPE actualmente en marcha “sin haber resuelto la anterior”. “Ello ha hecho que los y las aspirantes que puedan obtener plaza en la OPE anterior, hayan tenido que inscribirse en la nueva OPE e invertir tiempo y esfuerzo en preparar una OPE a la que no deberían haberse presentado”, indican.

“El desastre” del que hablan los sindicatos en sus relaciones con la plantilla “no se circunscribe únicamente a las OPE”, aseguran. “Procesos como las adjudicación de interinidades o el concurso de traslados suponen también un calvario para la plantilla: aplicaciones informáticas que dan continuos errores, información confusa, datos que aparecen y desaparecen, personas que no reciben ofertas de contratación a pesar de tener derecho a ello. Y así un largo etcétera”, denuncian, lo que supone un “maltrato continuado no solamente a los aspirantes, sino también a los trabajadores y trabajadoras de Osakidetza que deben gestionar todos estos procesos”.

Por otra parte, Osakidetza ha trasladado a las centrales durante la reunión una propuesta para la realización de elecciones sindicales, que llevan sin celebrarse diez años, aunque no satisface a los sindicatos. “Con más plantilla quieren que tengamos menos delegados sindicales”, denuncian. La propuesta ha supuesto poner por escrito lo que la dirección de Osakidetza había trasladado a las centrales en reuniones bilaterales, pero que “hoy está muy alejado de que podamos llegar a un acuerdo”.

Concentración de los trabajadores de la clínica La Asunción

Por otra parte, trabajadores de la clínica La Asunción de Tolosa se han concentrado ante el Parlamento Vasco convocados por ELA y LAB. La de Tolosa es la única comarca sin un centro público y el servicio lo presta en régimen de concierto este hospital privado. Los presentes han reivindicado un centro que sea “cien por cien público” y que se mantenga a la plantilla.

En la concentración han trasladado a la consejera del departamento de Salud del Gobierno vasco, Gotzone Sagardui, que La Asunción, que “cumple la función de hospital público comarcal, dando servicio a sus 62.500 habitantes” debe ser “contar con todos los servicios”. Además, le han exigido que “se garantice la presencia de todo el personal con el que cuenta actualmente la clínica”, con 328 trabajadores. En los últimos meses han llevado a cabo tres días de paros parciales y 23 huelgas en defensa de su convenio, pero han denunciado que “la empresa no tiene ninguna voluntad de negociar”. La plantilla solicita incrementos salariales superiores al IPC y jornadas de 35 horas.