Los sindicatos vascos exigen medidas contra los accidentes laborales: Más inspección y menos impunidad empresarial

Una cosa tan evidente como que el trabajo no signifique muerte, se ha convertido casi en una utopía. En el siglo XXI se siguen produciendo accidente propios del XIX, como caídas de altura, atrapamientos por máquinas...Pero las nuevas tecnologías, la digitalización o el teletrabajo están dando lugar a muchas dolencias entre las que el estrés laboral tiene un peso específico, pero que cuesta que sean reconocidas como accidentes laborales o enfermedades profesionales: infartos, ictus, o enfermedades mentales, como depresión o ansiedad. Dos vertientes que todos los sindicatos vascos han puesto este viernes de manifiesto en diferentes actos con motivo del Día de la Salud Laboral, un día de reivindicación que han celebrado por separado, pero coincidiendo todos en apuntar a los Gobiernos como culpables por no poner coto a la “impunidad” empresarial ante los accidentes laborales.

Reclaman más prevención y más inspección para prevenir unas muertes y unas dolencias que denuncian que en la mayoría de las ocasiones tienen detrás una situación de precariedad. Las cifras no pueden ser más dramáticas. El año pasado fallecieron 31 personas en Euskadi, y en lo que va de año ya han fallecido 14, la mitad de ellos por infartos, ictus o dolencias similares. Osalan rebaja precisamente estas muertes a 10, porque no todos los fallecimientos acaban entrando en la estadística como accidentes laborales.

El responsable de Salud Laboral de ELA, Peio Igeregi, ha censurado “la impunidad empresarial y la complicidad de los gobiernos” en la siniestralidad laboral durante una manifestación que ha recorrido las calles de Donostia. También se han puesto de manifiesto los efectos perniciosos sobre las condiciones de trabajo de las nuevas tecnologías y la digitalización.

“Una realidad que, en demasiadas ocasiones, lejos de mejorar las condiciones de salud y seguridad de las plantillas, ha venido a precarizar todavía más sus condiciones, desregulándolas unas veces o, en otras, suponiendo una importantísima carga de trabajo añadida ante la que es prácticamente imposible hacer frente”, aseguran.

UGT-Euskadi ha reclamado más medios de Inspección de Trabajo y de Osalan para detectar problemas de salud mental de origen laboral. Durante una concentración en la plaza Moyua, bajo el lema 'Por un derecho a la seguridad y salud en el trabajo real y efectivo', el secretario de Salud Laboral del sindicato, Juan Carlos Cárdenas, ha hecho hincapié en la cantidad de enfermedades que no se consideran profesionales pero que tienen que ver con el trabajo: “Una tipología de accidente detrás de la cual en muchas ocasiones se puede encontrar problemas relacionados con el estrés laboral, la ansiedad, el acoso y el burnout”, ha advertido. En este contexto, ha reclamado atención a la salud mental de las personas trabajadoras, ante el “elevado” porcentaje de trabajadores con problemas de salud emocional derivados de problemas psicosociales en sus empresas, a los que “raramente se les reconoce el origen laboral de dichas dolencias” y que “tienen que recurrir a sus médicos de cabecera en busca de mejoría y, en última instancia, incluso a médicos privados en un intento de acelerar su recuperación”.

En este sentido ha pedido “más ambición y valentía” a los gobiernos “para proteger la seguridad y salud de las personas trabajadoras sin ambages, para que no prevalezcan criterios económicos sobre criterios de protección de la salud en el ámbito laboral a la hora de legislar”. Además, ha reclamado una reducción del valor límite de exposición al amianto en el entorno laboral“ porque, según ha remarcado, ”la ciencia ya nos ha advertido que no hay valor seguro“.

Precisamente en torno al amianto, el representante de UGT ha reclamado que se establezca la exención fiscal para las indemnizaciones derivadas del Fondo de Compensación del Amianto. Este ha sido uno de los temas que han centrado la manifestación que ha llevado CCOO Euskadi bajo el lema bajo el lema 'Fondo de compensación del amianto, por una tributación justa - Bidezko tributazioaren alde'. Loli García, secretaria general de CCOO, que ha participado en la marcha junto al responsable de Salud Laboral del sindicato, Alfonso Ríos, ha censurado que se intente “poner trabas para materializar” el fondo de compensación del amianto y ha exigido a las diputaciones vascas que “tomen las medidas necesarias” para establecer una indemnización fiscal a las indemnizaciones porque tienen los “instrumentos” necesarios para hacerlo.

Además, han denunciado que los accidentes de trabajo son consecuencia de la “precariedad laboral” y de empresas que “incumplen la legislación”.

LAB realizó el acto central y manifestación este jueves, de víspera, bajo el lema 'Instituciones y patronal vais de la mano. Vuestras decisiones nos enferman y nos matan'. La coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, afirmó que el sindicato reforzará “la lucha por la prevención” ante la falta de “voluntad” para acabar con “la lacra” de la siniestralidad laboral y aseguró que se llevará esa “confrontación a los centros de trabajo, a las calles y también a Osalan”.

Aranburu señaló que “las decisiones de la patronal y de las instituciones nos hacen enfermar y nos matan”, e incidió en que “los accidentes laborales, las enfermedades profesionales y los fallecimientos son la cara más cruda de la crisis ecosocial” que viven los trabajadores.