En el undécimo día de la campaña electoral de cara a las generales del 23 de julio -duodécimo si se cuenta el jueves del arranque-, el PNV al final ha contado con la presencia de su mayor cargo institucional, el lehendakari Iñigo Urkullu. Aunque en las recientes municipales y forales participó casi a diario y desde el inicio pidiendo el voto para su partido, incluso con varias jornadas de dos actos, en esta ocasión Urkullu no había aparecido hasta que este lunes lo ha hecho en un acto de perfil bajo acompañando al cabeza de lista por Álava, Mikel Legarda. Ha sido una comunicación política sobre el arco atlántico, uno de los temas en los que más énfasis ha hecho en los últimos meses.
Según explicaron la pasada semana fuentes del PNV y de la Presidencia vasca a este periódico, se ha reservado para Urkullu un papel en el tramo final de la campaña toda vez que se quería dar todo el protagonismo al candidato, Aitor Esteban, en la primera mitad. Ello contrasta con la doble cita de 2019, en la que Urkullu estuvo presente en el arranque mismo de la campaña, también con Esteban como gran gancho del PNV. Esteban ha tenido actos en las tres circunscripciones vascas y ha estado en debates en RTVE o EiTB. Sí le ha acompañado en algunas intervenciones el presidente del Euzkadi Buru Batzar (EBB), Andoni Ortuzar.
En cuanto al contenido del acto del PNV, Urkullu ha insistido en la idea ya esbozada en los últimos meses, en los que se ha reunido con presidentes de otras comunidades de la cornisa cantábrica e incluso con diplomáticos de otros países. “Euskadi, las naciones y regiones que conformamos el arco atlántico, corremos el riesgo de perder protagonismo en Europa. Ésta es la realidad que venimos observando en los últimos años. Estamos preocupados. Las consecuencias serán negativas para todas y todos nosotros. No podemos permitir quedarnos fuera de la mesa donde se toman las decisiones que nos afectan. La creación de una macrorregión atlántica es fundamental para poder seguir defendiendo la posición de Euskadi en Europa. Es lo que exigimos al Gobierno español en el semestre de la presidencia española”, ha enfatizado.
El lehendakari ha garantizado que su propuesta es perfectamente viable en el concierto europeo. “No estamos inventando nada nuevo. A día de hoy existen cuatro macrorregiones en Europa: Báltica, Adriático-Jónica, Danubio y Alpina. Aspiramos a ser la quinta. Éste es un objetivo de país, ¿para qué sirve? Para tener voz propia en las decisiones importantes. Por ejemplo, para tener más incidencia en las conexiones energéticas, digitales o ferroviarias. No es admisible el incumplimiento de los compromisos adquiridos. No es serio. La conexión del tren de alta velocidad en 2030 es una exigencia de Europa y debe ser una realidad. Nos jugamos mucho. Los intereses particulares de los Estados no pueden estar por encima de los intereses generales la ciudadanía europea. Jamás. La macrorregión atlántica es una oportunidad para ganar peso en Europa, para avanzar en bienestar y oportunidades de empleo en Euskadi”, ha recalcado en un acto que ha tenido lugar en la calle de Eduardo Dato de Vitoria con la estación de ferrocarril de fondo.
Entretanto, Legarda ha criticado por igual a los partidos que tienen su sede central en Madrid como a aquéllos que “ponen por encima la ideología de izquierdas al autogobierno”. “Tenemos que estar con un grupo parlamentario fuerte para ser influyentes”, ha añadido Legarda, que ha dicho que el PNV es “en exclusiva” la voz de los vascos en las Cortes Generales. En todo caso, el candidato ha enfocado mucho su intervención en demandas europeas. Entre sus peticiones, ha planteado una “circunscripción propia” para las naciones sin Estado “para reflejar mejor la propia diversidad de la Unión”, mayor rango para el euskera o marcos fiscales, de deuda y déficit “diferenciados”.