Las reacciones no se han hecho esperar a la confirmación de que se acaba la búsqueda del segundo cadáver en el vertedero de Zaldibar, el de Joaquín Beltrán. Verter Recycling, empresa gestora de la planta derrumbada en febrero de 2020 y cuyos gestores están siendo investigados por homicidio imprudente ya que tenían noticias de posibles grietas en el vaso antes de que se produjera el alud, ha expresado su “enorme pena” al no haberse podido recuperar sus retos mortales. Hará “todo lo que esté a su alcance” para dar a la familia “el apoyo necesario en estos momentos tan difíciles”, según ha expresado en un comunicado.
“No nos imaginamos nada comprable al inmenso dolor que albergará hoy a sus familiares y amigos”, han señalado desde la compañía. Verter Recycling ha trasladado igualmente su “agradecimiento” a “todas las personas que han trabajado durante estos meses en esta difícil tarea, por su denodado esfuerzo y dedicación”, a pesar de que “el resultado final no haya sido el deseado”. “Por nuestra parte, mantendremos nuestra colaboración con el Gobierno en los trabajos de estabilización del terreno así como en la investigación para conocer las causas del derrumbe”, ha concluido la mercantil, informa Europa Press.
La plataforma Zaldibar Argitu, que lleva quince meses movilizándose para esclarecer lo ocurrido y que tiene también convocatorias para este viernes, ha pedido al Gobierno vasco que “depure responsabilides” si decide no seguir buscando a Joaquín Beltrán, trabajador desaparecido tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar el pasado año, y ha convocado movilizaciones para esta tarde. A su juicio, la “falta de información y transparencia” ha caracterizado desde el principio todo lo relacionado con el vertedero de Zaldibar y ahora “se le añade otro capítulo a la lamentable gestión llevada a cabo por las autoridades desde los comienzos”. El hecho de no encontrar el cuerpo de Joaquin Beltrán es “un fracaso absoluto”, tanto para familiares y amigos como para los ciudadanos. “Más allá del daño social y ecológico causado por el derrumbe, hoy toma protagonismo el daño humano y deja una herida abierta que nunca se cerrará”, ha asegurado.
El Ayuntamiento de Zaldibar, en Bizkaia y con alcalde del PNV, ha pedido al Ejecutivo autonómico que si existe “una mínima posibilidad”, se siga buscando a Joaquín Beltrán. En una nota, ha indicado que “la prioridad del Ayuntamiento ha sido siempre la localización de las personas desaparecidas tras el derrumbe”. En ese sentido, ha señalado que, tras localizar los restos de Alberto Sololuze el pasado mes de agosto, “el siguiente objetivo principal era el de encontrar a Joaquín Beltrán, y para este ayuntamiento, como hemos reiterado a lo largo de todo este año, sigue siendo prioridad”.
Desde la oposición, el parlamentario de EH Bildu Mikel Otero ha asegurado que, al “desistir” en la búsqueda de Joaquín Beltrán en el vertedero de Zaldibar, en el que desapareció tras su derrumbe, el Gobierno vasco “no ha cumplido el objetivo que se puso a sí mismo, pero ha admitido que ”técnicamente, hay un momento en el que es razonable“ detener. Además, ha afirmado que el ”carril político“ de Zaldibar ”no está cerrado“ y ha pedido que se ”depuren responsabilidades“. Otero ha retirado una interpelación a la consejera de Desarrollo Económico y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, prevista precisamente para este viernes a la luz de las noticias.
Desde Elkarrekin Podemos-IU, la portavoz parlamentaria, Miren Gorrotxagi, ha pedido depurar “de manera urgente” las responsabilidades penales y políticas por el derrumbe. Y ha añadido: “No quiero ni imaginar lo que están sintiendo en este momento. Sabíamos que este momento llegaría. Sin embargo, no pensábamos que llegaría hoy y de esa manera”. Ha dicho asimismo que Zaldibar es el “ejemplo de que la buena gestión de este Gobierno es un mito”. “La opacidad es evidente en toda la gestión postaccidente y ha habido una falta también de asunción de responsabilidades penales, políticas, nadie asume ninguna responsabilidad”, ha manifestado.
Curiosamente, Carlos Iturgaiz, del PP, ha empleado términos muy similares a los de Elkarrekin Podemos-IU al denunciar que “el mito de la buena gestión del PNV está enterrado en el vertedero de Zaldibar”. Ha acusado al Ejecutivo de Urkullu de “dejar sepultado” a un cadáver. Carlos Iturgaiz ha denunciado “el oscurantismo” que ha habido en esta “tragedia ambiental” en la que no hubo “suficientes controles”. Según ha censurado, ha habido “falta de información, de investigación, de inspecciones, y, además, tampoco ha habido ninguna responsabilidad política por parte del Gobierno Vasco”, pese a habérselo reclamado en el Parlamento Vasco. En Twitter, el reciente fichaje del PP, Toni Cantó, ha insistido en que Euskadi rechazó la ayuda de la UME para rescatar a los trabajadores sepultados, una tesis que llegó a alentar incluso la ministra de Defensa, Margarita Robles.