El lehendakari, Imanol Pradales, continúa manteniendo reuniones de toma de contacto tras su llegada a Ajuria Enea y, este martes, ha recibido en el palacio presidencial a los alcaldes de las ciudades vascas, Maider Etxebarria (Vitoria), Juan María Aburto (Bilbao) y Eneko Goia (Donostia). La única representante que no era del PNV en el encuentro, la socialista Etxebarria, ha aprovechado la ocasión para reivindicar la posición de Vitoria como capital vasca y para poner deberes al nuevo Ejecutivo de Pradales: más financiación, nuevas infraestructuras y ser nudo ferroviario de alta velocidad.
En concreto, según fuentes municipales, ha demandado la renovación del canon de capitalidad -que es la cuantía que recibe la ciudad como sede de las instituciones autonómicas- y a poder ser una mejora y que la futura conexión de AVE hacia Pamplona se haga entre capitales y no por Ezkio/Itsaso. En el ámbito sanitario, también ha pedido la reapertura del segundo PAC de Vitoria, que cristalice al fin el nuevo centro de salud del Casco Viejo y que el ambulatorio de Olárizu sea ampliado para atender a los nuevos barrios de la zona sur.
La reunión ha tenido una duración aproximada de dos horas. Las partes la han definido como una primera toma de contacto y la han calificado de “muy cordial”. Se ha hablado de Sanidad, de seguridad, de vivienda, de medio ambiente y de infraestructuras, entre otras cuestiones. No se ha esquivado uno de los grandes temas de actualidad y que, además, levanta una importante polvareda política entre territorios. ¿Cómo conectar la 'Y vasca' de alta velocidad hacia Navarra? La alcaldesa de Vitoria ha recalcado a sus interlocutores que “la mejor opción” es la línea Vitoria-Pamplona y no la alternativa de Ezkio/Itsaso que las instituciones guipuzcoanas defienden con vehemencia.
El plan original de la 'Y vasca'´, cuyas obras arrancaron en 2006, situó una única estación fuera de las capitales. Era en el pequeño pueblo de Ezkio/Itsaso, que en estos años ha llegado a separarse y volverse a fusionar. El único sentido de ese apeadero era que se iba a realizar allí una conexión hacia Pamplona y, por ende, también hacia Zaragoza y Barcelona. Sin embargo, el Gobierno de España presentó públicamente en 2018 una solución más barata (del orden de 1.000 millones menos) y con aparente menor impacto ambiental, una línea de Vitoria a Pamplona por el trazado actual convencional. Desde entonces, esa conexión ha ido apareciendo año tras año en los presupuestos del Estado y en otros documentos oficiales.
PNV, PP y los socialistas, sin excepciones, han defendido una cosa y la contraria en función del territorio. Todavía ahora lo hacen. Pese a las dudas sobre el trazado, en 2020 se iniciaron las obras de la estación de Ezkio/Itsaso que en 2023 tuvo el honor de ser la primera de toda la nueva red vasca de AVE en ser finalizada. A la vez, el Parlamento Europeo incluyó esta ruta en su mapa general para la Unión Europea. En esas fechas, la solución salomónica acordada era volver a hacer estudios técnicos sobre la alternativa de Gipuzkoa y sobre las implicaciones de tunelar la sierra de Aralar para que puedan circular los convoyes. Este verano, el Gobierno de España, que es el titular de la infraestructura, pareció dejar claro que mantendrá la apuesta por la línea Vitoria-Pamplona y Gipuzkoa ha vuelto a sacar toda la artillería para defender su trazado. Con Eider Mendoza a la cabeza, busca la complicidad del lehendakari Pradales, que ha optado por insistir en que toca esperar a los informes para pronunciarse. En el pasado, recuerda Mendoza, el equipo de Iñigo Urkullu hizo alegaciones contra la línea Vitoria-Pamplona y a favor de Ezkio/Itsaso.
Etxebarria, como alcaldesa de Vitoria, ha entrado de lleno en el debate esta semana. Primero publicó una carta en 'El Correo', el diario local de mayor tirada. Y ahora ha insistido en esta solución ante Pradales. Tiene, además, el respaldo expreso del líder de su partido en Euskadi, que es guipuzcoano. Eneko Andueza ha dicho que “parece claro” que la opción más viable es la unión entre capitales. Se da la circunstancia de que el secretario de Estado de Transportes es un socialista de Gipuzkoa, el exalcalde de Irún José Antonio Santano. Desde Donostia no han querido entrar en detalles de si han defendido la fórmula de Ezkio/Itsaso. El alcalde Goia, en X, se ha limitado a apuntar que ha sido para “reafirmar” la “apuesta” por “seguir trabajando de la mano para impulsar los proyectos en común” y portavoces oficiales añaden que, en el futuro, habrá reuniones bilaterales con cada ciudad para seguir trabajando.
El canon de capitalidad y Osakidetza
La regidora, que accedió al cargo en 2023 y que es la primera mujer en lograrlo en democracia en Euskadi en una capital -en Bilbao hubo una alcaldesa franquista, Pilar Careaga-, ha recordado también en la reunión que a finales de 2024 toca renovar el canon de capitalidad, la aportación autonómica que recibe Vitoria por ser, técnicamente, “sede de las instituciones comunes” de Euskadi. Fue una fórmula acordada en 2012 por el entonces alcalde, Javier Maroto, del PP, con el lehendakari socialista Patxi López. La aportación inicial fue de 4,4 millones, que luego pasó a ser de 5 millones en la primera legislatura de Urkullu. Con Gorka Urtaran, en la segunda y tercera legislaturas se duplicó el pago hasta los diez millones de euros. La nueva alcaldesa insiste en que “hay que” renovarlo y “si puede ser” también mejorarlo. Preguntada por ello, la portavoz de Pradales, María Ubarretxena, ha constatado que por una cuestión de calendario este asunto se analizará antes de que finalice 2024, pero no ha entrado en más detalles.
Para Etxebarria, además, es muy importante la mejora de Osakidetza en Vitoria. Ya se ha reunido con el nuevo consejero del ramo, Alberto Martínez, pero le ha recordado al lehendakari la necesidad de que la ciudad vuelva a tener un segundo PAC -se cerró el de San Martín- y que se acometa ya el traslado del ambulatorio del Casco Viejo. Igualmente, aspira a que en esta legislatura se pueda lograr la mejora del servicio en la zona del sur, que ha ganado en población más allá de Adurza con la urbanización de Esmaltaciones, Aretxabaleta, Gardelegi y Goikolarra.