La Comunidad de Regantes de Tierra de Barros ha advertido a la Junta de Extremadura que no dejará que el proyecto de nuevos regadíos “se guarde en un cajón”, y replica al Gobierno regional PP-Vox en el sentido de que el anterior ejecutivo de Fernández Vara dejó la iniciativa “muy avanzada”.
Para la puesta en marcha de las 15.000 hectáreas nuevas de riego solo “hace falta voluntad política” y los regantes, en contra de lo afirmado por toda la derecha política y agraria extremeña, no se han sentido engañados por el anterior Gobierno extremeño, “que dejó un ”proyecto muy avanzado“.
“Han sido muchos los pasos que hemos dado y no vamos a parar al final del camino”, ha dicho Isidro Hurtado, presidente de la Comunidad de Regantes (CCRR), en una comparencia acompañado por la directiva de esta asociación que nació en 2015 y ha trabajado con diferentes presidentes autonómicos que han apostado por el proyecto de regadío, independientemente del partido político ya que Monago gobernó cuatro años [su gobierno impulsó este proyecto en 2014].
“Estamos hablando del futuro de una región en pleno corazón de Tierra de Barros”, ha dicho Hurtado, porque la agricultura como la conocemos hoy “no tiene mucho futuro y hay que apostar por el regadío para que los agricultores se puedan desarrollar profesionalmente”, afirmaba este miércoles.
Desde la Comunidad no quieren entrar “en juegos políticos” pero apuestan por la apertura de una investigación que aclare lo sucedido durante la tramitación del proyecto, ya que son conocedores de que los fondos existen y están desbloqueados.
La puesta en marcha de las obras pasaría, según les han trasladado desde la Junta, por obtener el visto bueno de la Unión Europea para evitar que se obligue a devolver esos fondos o posibles multas por incumplimiento de normativas medioambientales.
Paralizado en Bruselas
Esto genera una “gran incertidumbre” en los regantes, porque el proceso ha quedado paralizado hasta obtener la respuesta de Bruselas y las obras no podrán comenzar en mayo como estaba previsto, pero piden a la Junta agilizar el proceso para obtener los informes de la UE y solventar los posibles problemas y trabas existentes.
Tanto la Presidencia de Extremadura como la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural “han trasladado su disposición para hacerlo”, por lo que la CCRR trabajará para “que se retome lo antes posible, porque los problemas se pueden solucionar con buena voluntad”.
Isidro Hurtado ha destacado que “está en juego la ilusión de 1.200 familias y la estabilidad económica de los agricultores, porque no podemos estar mirando al cielo para saber si tenemos cosecha o no”, por lo que seguirán luchando para que el regadío en las 15.000 hectáreas que recoge el proyecto sea una realidad en Tierra de Barros.