Viviendas nuevas públicas con un precio de alquiler asequible para clases medias o barato de tipo social, y en las cuales el gasto de energía no renovable no debe suponer más del 20 por ciento del consumo total. Es un programa nacional del Gobierno que en el caso de Extremadura y en colaboración con la Junta y ayuntamientos promoverá entre 460 y 500 viviendas nuevas.
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) y la Junta de Extremadura han firmado un acuerdo para construir las primeras 82 en alquiler social o asequible en edificios energéticamente eficientes, con más de 3,8 millones de euros de los fondos europeos de recuperación NextGenerationEU.
El acuerdo ha sido suscrito por el director general de Vivienda y Suelo, Javier Martín; y el director general de Arquitectura y Calidad de la Edificación de la Junta de Extremadura, Alfonso Gómez, y recoge ayudas para la promoción de viviendas en un total de ocho municipios y las ejecutará directamente la Administración extremeña, propietaria del suelo.
En total, la inversión estimada en la promoción de estas 82 viviendas de protección pública es de 7,55 millones de euros, ha informado el Mitma en un comunicado.
Las viviendas se construirán en Alcuéscar -dos-, Puebla de la Reina -dos-, Aldea del Cano -tres-, Puebla de Obando -tres-, Robledillo de Trujillo -cuatro- y Portaje -cuatro-, además de 24 en Almendralejo y 40 en la barriada de Suerte de Saavedra de Badajoz.
La actuación se enmarca en el programa de ayuda a la construcción de viviendas en alquiler social en edificios energéticamente eficientes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Se trata de la promoción de viviendas de nueva construcción sobre terrenos de titularidad pública que incrementen el parque público de vivienda asequible, durante un período mínimo de 50 años y con un consumo de energía primaria no renovable inferior en un 20 % como mínimo a los requisitos exigidos en el Código Técnico de Edificación.
Para este programa, dotado con 1.000 millones de euros, el Mitma ha trasferido ya a Extremadura 11,525 millones de euros y está prevista una transferencia adicional del mismo importe a principios del año 2023, hasta alcanzar un total de 23,05 millones, lo que supondrá el impulso de en torno a 460 viviendas.
La ayuda que se aporta es de hasta 700 euros por metro cuadrado de superficie útil de vivienda, con un máximo de 50.000 euros por vivienda.