La Alianza Ibérica por el Ferrocarril reclama un tren directo y diurno entre Madrid y Lisboa para 2025, así como un servicio nocturno entre la capital lusa y Barcelona, más otras conexiones ferroviarias entre ambos países.
Esta petición forma parte de las conclusiones de la segunda edición de las Jornadas Ibéricas por el Ferrocarril, celebradas este fin de semana en Lisboa por la Alianza, que reúne a 21 organizaciones sociales, sindicales, económicas y medioambientales de España y Portugal para mejorar los servicios ferroviarios en la península.
Esta plataforma apeló a que se avance ya con nuevos servicios sin esperar a poner en marcha las grandes inversiones previstas que, “siendo inaplazables y urgentes, demorarán algún tiempo en concretarse”, como la nueva travesía del Tajo que “no estará lista antes de 2030”, según un comunicado divulgado por los organizadores.
Proponen un servicio directo de larga distancia entre Madrid y Lisboa, en formato diurno, y otro nocturno entre Barcelona y Lisboa.
También servicios directos entre Madrid y Oporto vía Salamanca y Fuentes de Oñoro, así como regionales entre Badajoz y Lisboa y en la costa atlántica, en el eje Oporto-Vigo-Santiago-La Coruña.
Nocturno Lisboa-Salamanca-Francia
Además, la Alianza manifestó su apoyo a la empresa ferroviaria lusa Comboios de Portugal (CP) en su petición para organizar un servicio nocturno entre Lisboa y Madrid [que Renfe rechaza porque tendría pérdidas así como las tuvo en el pasado], que en Medina del Campo (Valladolid) se desgajaría en una rama a Madrid pero otra hacia País Vasco, frontera de Hendaya y París.
Estos servicios existían hasta 2020, cuando se suspendieron con la llegada de la pandemia, y no se han retomado.
La Alianza consideró que las inversiones ferroviarias “pueden y deben ser aceleradas” ante la realización del Mundial de Fútbol de 2030, que se celebrará en España, Portugal y Marruecos.
“Es imperativo que se tomen medidas para hacer que los tiempos de viaje del ferrocarril sean competitivos respecto a los viajes aéreos, ya que entre el 15 % y el 20 % de los movimientos aéreos de Lisboa y de Oporto se destinan a ciudades de la península”.
También apeló a que se acelere el desarrollo de las infraestructuras en falta para reducir el uso del transporte por carretera y se eliminen los viajes aéreos en distancias cortas.
“Portugal no debe repetir los errores de España, desarrollando la red transeuropea principal que conecta puertos, aeropuertos y grandes centros urbanos, sin tener en cuenta su conexión con la red convencional”, opina la Alianza.
El ferrocarril debe “estructurar” el transporte ibérico de mercancías, que representa “cerca del 40 %” de las emisiones de dióxido de carbono de la movilidad terrestre y del consumo de combustibles por carretera.