Extremadura cerrará el ejercicio presupuestario de 2022 con un déficit del 1,2 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), dos décimas por encima del fijado para las CCAA en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado del gobierno central.
Así lo ha adelantado este lunes el secretario general de Presupuestos y Financiación, Isidoro Nova, en la Comisión de Hacienda y Presupuestos de la Asamblea, en la que ha comparecido para responder a sendas preguntas de Ciudadanos y Partido Popular sobre las previsiones de cierre del ejercicio de 2022.
Novas ha precisado que estos datos son provisionales, teniendo en cuenta los de Administración General y Servicio Extremeño de Salud (SES), que “son los que marcan la tendencia”, ya que aún faltan por consolidar los de ciertos entes autonómicos como la Corporación Extremeña de Medios Audiovisuales (CEXMA).
Así, ha indicado que se prevé cerrar con unos ingresos de 5.355 millones de euros y unas obligaciones no financieras de 5.569 millones.
En cuanto a la deuda, la ha fijado, también de manera provisional, en 5.131 millones de euros, de las que 5.123 millones corresponden a Administración General y 8 millones al SES, lo que supone 85 millones más que en el cierre de 2021, el 23,5 por ciento del PIB, un 1,6 por ciento menos que el de 2021.
Por lo que respecta al pago medio a proveedores, Isidoro Novas estima que se cerrará entre 10 y 12 días, similar al que ya se recogía en octubre.
Ha asegurado que los 214 millones de euros más de déficit del ejercicio de 2022 respecto al de 2021 se justifican, entre otras cuestiones, en el un aumento en 59 millones de euros en lo relativo al capítulo 1 (gastos de personal), en 19 millones más en el gasto corriente del SES, en 20 millones por electricidad y gas o 10 millones más en el gasto farmacéutico.
También crece, en 104 millones de euros, el capítulo 4, sobre todo en lo relativo a programas de la Política Agraria Comunitaria (PAC), el aumento de las ayudas en los municipios (30 millones), a la Universidad de Extremadura (10 millones) y recetas médicas (17 millones).
En cuanto al grado de ejecución, ha precisado que se va a ejecutar 409 millones de euros más que en el ejercicio de 2021, porcentualmente similar, ya que estará en torno al 97 por ciento en lo que se refiere a políticas propias, siendo menor en aquello que se refiere a financiación finalista y condicionada.
El portavoz de Ciudadanos, José María Casares, ha criticado que, ejercicio tras ejercicio, la Junta recurra “a cientos de modificaciones” para usar partidas iniciales previstas para otros fines, como el pago de las recetas farmacéuticas, y ha recordado que el propio Tribunal de Cuentas le recomienda que se financie “correctamente” al SES.
Sin embargo, Novas ha defendido que el problema del SES no es e presupuesto sino de “demanda ilimitada”, ya que “se le pueden echar millones y nunca será suficiente”, por lo que ha mostrado su disconformidad con esta recomendación del TC.
Por su parte, el portavoz del PP, Luis Alfonso Hernández Carrón, ha recordado que el déficit final de Extremadura será muy similar al que ya predijo la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) y que la Intervención General del Estado ya alertó de que la región es la que más ha incrementado su gasto.
A juicio de Hernández Carrón, pese a que en 2020 y 2021 hubo superávit, no es hasta 2022 cuando la Junta está pagando subidas salariales como las de los empleados públicos, una cuestión que achaca a la “casualidad” de la proximidad de las elecciones.
Además, ha señalado que aunque se hayan suspendido las normas de estabilidad presupuestaria, “el déficit no desaparece”, y ha criticado, como Cs, que se pague con el dinero de la renta básica el gasto farmacéutico de otras el cosas.