Es un ambicioso plan que tiene entre sus objetivos la estimulación de la producción, la activación del empleo y la dinamización de sectores estratégicos para la comunidad extremeña.
La Junta de Extremadura y los agentes sociales y económicos han presentado este jueves el Plan de Impulso Económico Regional a corto plazo, que aspira la economía regional crezca más cerca del 3 que del 2 por ciento.
Entre sus acciones contempla un plan integral de comercio de proximidad, un plan de empleo social y la potenciación de las infraestructuras productivas. También la mejora de la eficiencia energética de las viviendas y un plan renove de electrodomésticos y de mobiliario del hogar, así como la creación de un consorcio para la promoción del turismo o una modificación de la normativa en materia de políticas de empleo.
Las ayudas al empleo de calidad, una línea de avales internacionales y un plan de desarrollo cooperativo son otras de sus estrategias.
El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha presentado los planes junto a los secretarios regionales de los sindicatos CCOO y UGT, Julián Carretero y Patrocinio Sánchez, respectivamente, y el responsable de la Confederación Empresarial Regional Extremeña (Creex), Javier Peinado.
En materia de empleo el Ejecutivo afirma que no se conforma con que la tasa de desempleo se reduzca un par de puntos porque “el problema es grande” y, por tanto, los objetivos también tienen que serlo. Para Vara, lo ideal es que quien quiera trabajar pueda hacerlo“.
Plan empleo verde
En la comparecencia se ha detallado también el Plan de Sostenibilidad, de Economía y Empleo Verde, complementario al anterior y con medidas más a largo plazo, que persigue aprovechar el extraordinario capital natural de la comunidad para propiciar un crecimiento sostenible en el marco de un nuevo modelo productivo.
Vara ha destacado que el Plan de Impulso Económico presentado adquiere más significado que nunca en un contexto en que las previsiones de crecimiento del PIB en 2016 se están modificando a la baja en el país, debido a la ralentización de las economías emergentes y a la “incapacidad” de gestión del Gobierno central.