Infraestructuras de Portugal se marca 2025 como fecha para terminar el tramo de nueva línea ferrroviaria Évora-Elvas, que permitirá enlazar en Badajoz con la red española y poner en servicio un tren directo Madrid-Lisboa con un tiempo de viaje de cinco horas frente a las nueve actuales y con dos trasbordos.
“Estamos trabajando para, en dos años, llegar a reducir a cinco horas el recorrido entre Madrid y Lisboa” en ferrocarril, ha explicado este martes en Lisboa Miguel Cruz, presidente del ente público Infraestructuras de Portugal, y según recoge la agencia Efe.
Ha sido en un seminario empresarial de las cámaras de comercio portuguesa, y luso-española, sobre las conexiones ferroviarias transfronterizas entre los dos países, y en el que Miguel Cruz ha vuelto a dejar claro que para su país la prioridad en estos momentos está dentro de casa, en abordar la línea de alta velocidad Lisboa-Oporto, que sería la segunda puesto que los 80 kilómetros nuevos Évora-Elvas permitirán velocidades de hasta 250 km/h a los trenes de viajeros.
Portugal, ha añadido el presidente de su organismo nacional de infraestructuras (en lo ferroviario, el Adif luso) trabaja en modernizar su red ferroviaria en el Alentejo, frontera con Badajoz, con la vista puesta en la mejora del transporte tanto para pasajeros como para mercancías.
Una vez concluido el trabajo, “estarán creadas las condiciones que permitirán hacer la conexión” en cinco horas entre Lisboa y Madrid, las únicas capitales de países vecinos miembros de la UE que no están conectadas por un tren directo.
Actualmente la relación ferroviaria entre esas dos ciudades es una línea sinuosa que desde Madrid toma rumbo suroeste a Lisboa pero al llegar a Badajoz y la frontera, al no haber tendido ferroviario hacia la capital portuguesa, sube al norte hasta Entroncamento, en el centro de Portugal, para luego por fin girar hacia el sur a la estación lisboeta de Oriente; mediante dos trasbordos, en ocho horas y media se llega desde Lisboa a Madrid, y en nueve horas y 10 minutos al revés debido a una mayor espera en los enlaces.
Retrasos por todos lados
En la parte de Portugal su Gobierno pretende tener lista la alta velocidad Lisboa-Oporto en 2030, con un primer tramo cerca de Oporto acabado en 2028, y prolongar luego esa nueva línea a Braga y Vigo (Galicia).
En el centro del país, aunque la nueva línea Évora-Elvas debería haber estado terminada en 2022, lleva un retraso que hace previsible que no pueda entrar en funcionamiento hasta finales de 2024 o, más probablemente, a principios de 2025.
Por otro lado está mejorando la que sería su tercera conexión con España, por Salamanca, una obra entre Pampilhosa y Guarda que mantiene la línea cerrada desde abril pasado, y debería haber reabierto ya pero por retrasos no lo hará como mínimo hasta diciembre de este 2023.
En España
En la parte española de la conexión por tren Madrid-Lisboa, a lo largo de este primer semestre debería estar hecha la electrificación Badajoz-Monfragüe/Plasencia, mientras sigue redactándose el estudio informativo entre Badajoz (Novelda) y la frontera, que incluye en la misma una nueva estación internacional de alta velocidad Badajoz/Elvas.
Monfragüe/Plasencia-Navalmoral de la Mata está anunciado en nueva línea para 2025, y sería entonces cuando fuera posible un tren directo Madrid-Lisboa en cinco horas.
A partir de ahí, con el cuello de botella en el trazado indeciso entre Navalmoral, Toledo y Madrid, solo cabe esperar mejoras de momento consistentes en una posible y anunciada electrificación de la línea actual.