Al cierre de 2015 “las agresiones no han sido algo anecdótico, y en muchas ocasiones los agentes patrullan ”en solitario, en zonas aisladas y sin material de autoprotección“.
Entre los últimos actos vandálicos recuerdan un intento de atropello a un agente extremeño en Jerez de los Caballeros (Badajoz), así como el incendio de un coche oficial en Quirós (Asturias).
Así lo denuncia la Asociación Española de Agentes Forestales y Medio Ambientales, que advierte de su indefensión ante las agresiones físicas, amenazas de muerte e insultos que sufren, una realidad en la que aseguran que trabajan los más de 6.000 de su colectivo. Para aumentar su seguridad, los agentes forestales proponen ir por parejas, como la Policía Nacional y la Guardia Civil, y tener acceso a la licencia de armas tipo A. Además, plantean su inclusión en la Ley de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
“Enfrentarse solo a una persona que te está encañonando con la escopeta y a quien tienes que multar por incumplir la ley es muy duro y da miedo hasta al más valiente”, explica la asociación.
Además, no todos cuentan con uniforme ni coche oficial, lo que también les resta credibilidad. “Es cierto que en algunas CCAA de manera periódica reciben cursos de defensa verbal, pero ¿de qué forma puede defenderse ante las patadas y puñetazos sólo, única y exclusivamente con la palabra?. ¿Cuántos más deben ser agredidos para que se tomen medidas?”, concluye el comunicado.