Jose Polo, copropietario del hotel-restaurante Atrio, en Cáceres, que el 27 de octubre de 2021, sufrió el robo de 45 botellas de vino, valoradas en 1,6 millones de euros, entre ellas, un Chateâu d’Yquem de 1806, valorado en 350.000 euros, ha señalado este lunes, al término de su declaración en el juicio que se sigue contra el rumano neerlandés Gabriel Constantin Dumitru y la mexicana Priscila Lara Guevara, como presuntos autores del robo, que estaría dispuesto a negociar un rescate por ésta última, por el valor sentimental e histórico que tiene y porque “su historia está unida a la historia de Atrio”.
Él y su socio, Toño Pérez, la adquirieron en una subasta en el año 2000, junto con otras 24 botellas, por las que pagaron cerca de 8 millones de las antiguas pesetas.
Esta botella desapareció de su “capilla”, dentro de la bodega de Atrio en la madrugada del 27 octubre, junto con otras 44 botellas, entre ellas, 38 de la prestigiosa bodega Romanee Conti. Sobre éstas últimas, Jose Polo ha indicado que son valiosas, pero se pueden encontrar en el mercado de un año u otro.
La Chateâu d’Yquem es única, la propia bodega, propiedad del grupo de lujo Louis Vuitton, la botella más antigua que tiene es de 1866. El valor, según dijo, es relativo “todo depende de que alguien quiera vender algo y haya otra persona dispuesta a pagarlo, pero, por supuesto, yo no la hubiera vendido ni por un millón de euros a no ser que me hubiera hecho falta para pagar a los trabajadores o a los proveedores, porque era una botella con mucha historia”.
El hecho de que los ladrones no hayan intentado negociar con las botellas, significa para Jose que el robo ha sido fruto de un encargo, y que “quien ha encargado el robo es más peligroso que la cárcel, es de sentido común”.