Miembros de los Campamentos Dignidad continúan “montando el belén en Navidad”, el lema de una protesta por los derechos sociales básicos que desarrollan en estas fechas, y que les ha llevado a los encierros que mantienen desde el martes pasado en la catedral de Badajoz, y en el salón parroquial de la iglesia de San José en Plasencia.
Una veintena de miembros en cada caso han pasado la Nochebuena de esa forma, reclamando seis demandas que se resumen en tres propuestas más concretas según uno de los miembros del Campamento, Manuel Cañada: “pan, trabajo y techo”.
En Badajoz continúan en unas dependencias de la catedral, en principio hasta este viernes 26, pero ahora la posibilidad es alargar el encierro hasta el día 4, con la participación en otras acciones como el apoyo el día 29 a los trabajadores de Cleanet que no cobran, o una protesta el día 30 con motivo del concierto del cineasta Woody Allen en la capital pacense.
Cañada afirma que en el encierro está participando mucha más gente y de formas diversas, como quienes les han llevado churros y café para el desayuno, la cena de o comida para la jornada, además de quienes les han cedido colchones.
En sí mismo el encierro es un tipo de acción que “nosotros sabemos que es muy sacrificada por las fechas que son, pero al mismo tiempo donde tiene la complicación es donde también reside la fuerza a la hora de que la gente vea que si estamos aquí no es por capricho ya que todos tenemos familia, todos tenemos hijos, tenemos padres”.
En Plasencia en principio ocuparon la iglesia de Santo Domingo, de donde trataron de echarles y al final llegaron a un acuerdo con las autoridades eclesiásticas, que les han cedido un sitio en los salones parroquiales de San José para hacer la Navidad “de los parados y precarios”, explica Manuel Rodríguez.
“En el siglo XXI sigue habiendo belén, con nosotros está Verónica, una mujer con dos niños de dos y cuatro años que si no lo evitamos va a ser desahuciada de su casa el 14 de febrero”.
Igualmente van a decidir en asamblea si dejan el encierro el 26, o intentan continuar.