Dos artistas denuncian a Monago por el uso de una creación suya en la campaña electoral del PP

Se trata de un logo con los colores de la bandera de Extremadura que sigue la estética ‘Mod’, de los años 50-60. Se ha convertido en el elemento distintivo de la campaña del PP de Extremadura. Es su emblema de campaña, como puede comprobarse en su página oficial.

Todos llevan una ‘chapita’ con estos colores, incluidos altos cargos en sus actos institucionales. Los escenarios repiten los colores por toda la geografía, es el nuevo distintivo de Monago. Sin embargo Hernán y Rodrigo Pacheco registraron este diseño en 2010 bajo el nombre ‘El punto extremeño’. El diseño les pertenece.

Según han explicado a este diario, el PP de Extremadura no les ha pedido permiso para utilizar su creación y este mismo miércoles tienen pensado presentar una querella criminal en los juzgados de Mérida contra el Partido Popular extremeño. También irá dirigida contra Monago, como presidente del PP de Extremadura, así como contra el secretario general del PP de Extremadura, Fernando Manzano, y el gerente regional del Partido Popular, Antonio Galán.

Una denuncia en la que alegan una presunta vulneración de los derechos de autor, como recoge la Ley de Propiedad Intelectual. Han elaborado un dossier con más de 300 páginas que recoge el uso ilícito de una marca registrada por ambos creadores sin su permiso. Será la prueba que presentarán en su querella.

De hecho el logo está presente en todas las redes sociales del PP de Extremadura, en las notas de prensa, en los mítines, incluso en los locales del Partido Popular, que han cambiado su color azul por el tricolor de ‘Hacemos’.

Los artistas solicitan como medida cautelar el secuestro de la campaña del PP de Extremadura, después de que los populares no hayan aceptado compensarles por el uso de esta creación.“En una reunión interna con representantes del partido se limitaron a transmitirnos que, aunque reconocían que la imagen era nuestra, no tenían muy claro que no pudieran utilizarla”, lamentan.

La denuncia no solo contempla la usurpación de la creación sin su consentimiento, sino además la modificación parcial de un logo sin el permiso de sus propietarios.